Santo Domingo.- Ha muerto el Papa Francisco, y con él no solo se marca el líder de la Iglesia Católica, sino un símbolo de humanidad, sencillez y pensamiento profundo.
Francisco no fue un pontífese distante, fue un Papa que caminó con la gente, que usó un lenguaje llano para explicar realidades complejas. Además, supo hablarle al mundo en un tiempo de incertidumbre, soledad espiritual y fracturas sociales.
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