SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Esta semana acaparó titulares el caso de una demanda contra el Consulado de Estados Unidos, por los resultados de una prueba de ADN errónea, que provocaron la desintegración de su familia.
Ahora, la mujer que vio lesionada su reputación y se vio forzada a criar su hija sin un padre, habla por primera vez con El Informe.
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La demanda por daños y perjuicios que interpusieron Guerrero y Familia será conocida el 14 de noviembre en la Tercera Sala Civil del Distrito Nacional.
Como parte de la evidencia, presentarán una copia de un correo donde supuestamente un representante de la compañía que hizo la primera prueba de ADN, ofreció al abogado 4 mil dólares para compensar a la familia.
De su lado, la delegación diplomática de Estados Unidos, mediante un escueto comunicado, dijo que «de acuerdo con las secciones aplicables de las leyes estadounidenses, no pueden comentar públicamente sobre casos particulares.»