Washington. – Estados Unidos aseguró este miércoles que confía en que Kenia tiene claras las normas de actuación en el inminente despliegue de una fuerza de seguridad en Haití y que su labor será puramente de apoyo a la gobernabilidad del país, sumido en una oleada de violencia de bandas armadas y desgobierno.
«En lo que se refiere a si Kenia entiende la esencia de la operación, creo que así es y que los pasos necesarios para el despliegue se completarán en un futuro no muy distante», aseguró en una rueda de prensa Jake Sullivan, asesor del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca.
Kenia se ha comprometido a liderar una fuerza multinacional de apoyo a la seguridad en Haití para acabar con la violencia de las bandas armadas y devolver control al Estado de parte del país, sumido desde hace más de una década en una espiral de violencia, pobreza y desintegración de la gobernabilidad.
«La fuerza multinacional de apoyo a la seguridad es precisamente eso: una misión de apoyo a la instituciones del Estado de Haití y no un reemplazo. Esa es la proposición central detrás de esto y es lo que van a hacer», explicó Sullivan.
La misión es el resultado de una resolución del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, cuenta con el apoyo financiero de Estados Unidos y estará supeditada al control de la Policía Nacional de Haití.
Se espera que este jueves, cuando comienza en Washington la visita de Estado del presidente keniano, William Ruto, el presidente estadounidense, Joe Biden, y su homólogo den detalles sobre el despliegue de fuerzas de seguridad del país africano a Haití, previsto para esta misma semana, pero que acumula retrasos.
Se preveía que Ruto y Biden harían coincidir sus reuniones en la Casa Blanca con el anuncio del despliegue de una avanzadilla de unos 200 agentes a Puerto Príncipe.
La llegada de vehículos blindados y helicópteros pertrechados para la evacuación médica está retrasando el despliegue, al tiempo que Nairobi aún debe entregar por escrito al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas sus normas de interacción con la Policía Nacional de Haití.
Sullivan señaló que esa formalidad se completará pronto, pero no especificó fechas, aunque seguramente la parte más esencial del despliegue no se dará hasta junio.
Kenia se ha comprometido a liderar una fuerza de unos 2,500 efectivos para poner coto a las bandas armadas que se reparten el control de gran parte de las principales ciudades del país, empezando con Puerto Príncipe, que esta semana pudo reabrir su aeropuerto tras tres meses cerrado por la inseguridad.
La Administración de Biden ha comprometido 300 millones de dólares para el despliegue de esa fuerza multinacional, pero ha calculado que dicha misión tendrá un coste anual de entre 500 y 600 millones, por lo que ha presionado a sus aliados para que realicen más aportaciones.