Washington.- Estados Unidos defendió este martes que Israel tiene el derecho a dar una «respuesta agresiva» por el ataque sin precedentes de Hamás y confió que lo hará respetando el derecho internacional.
Así se expresó el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, al ser cuestionado en una rueda de prensa sobre la decisión de las autoridades israelíes de cortar el agua y la electricidad de la Franja de Gaza en represalia por el ataque.
«Israel tiene el derecho a llevar a cabo una respuesta agresiva para responder al terrorismo cometido contra sus ciudadanos. Esperamos que respeten el derecho internacional y permaneceremos en estrecho contacto con ellos», dijo.
El portavoz subrayó que Hamás «atacó deliberadamente» a ciudadanos israelíes, incluido mujeres y niños, de la manera «más inhumana posible».
Aseguró que el Gobierno estadounidense «no tiene ningún pleito con el pueblo palestino», a quien suministra y seguirá suministrando ayuda humanitaria para «mejorar sus condiciones de vida».
En cambio, denunció que «no hay nadie que tenga más desprecio por la vida de los civiles» que Hamás, a quien acusó de haber optado por «el camino de la muerte y la destrucción» y de haber lanzado su ataque a sabiendas de que habría represalias de Israel.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha prometido al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, todo el apoyo necesario para la defensa del Estado judío, mientras que el secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, llegará el jueves a Israel para coordinar la ayuda a ese país.
Israel respondió al ataque sin precedentes de milicianos de Hamás declarando el sábado el estado de guerra y bombardeando la Franja de Gaza, en lo que supone la peor escalada en décadas del conflicto palestino israelí.
El número total de víctimas mortales sobrepasa las 1,800 personas.
La cifra oficial de muertos en Israel supera los 900, aunque los cuerpos encontrados en las zonas liberadas hoy pueden elevar esa cantidad, y los heridos llegan a los 2,900, mientras que los intensos bombardeos sobre la Franja han dejado también 900 muertos y más de 4,500 heridos.