WASINGTON.- Estados Unidos ha culminado el traslado al aeropuerto de Kabul de todo el personal de su embajada estadounidense en Afganistán, horas después de iniciar una evacuación aérea desde ese complejo que recordó a la desarrollada durante la caída de Saigón en 1975.
A última hora del domingo en Washington, y cuando ya se acercaban las 6:00 de la mañana del lunes en Kabul, el Departamento de Estado confirmó que había «completado» el proceso para transportar al aeropuerto a los aproximadamente 4.000 empleados de su embajada en Kabul.
«Todo el personal de la embajada está ahora ubicado en las instalaciones del aeropuerto internacional Hamid Karzai, cuyo perímetro está protegido por los militares estadounidenses», dijo en una breve nota el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price.
La bandera estadounidense fue retirada del complejo de la embajada estadounidense y trasladada junto al personal a un «lugar seguro», y el encargado de negocios en el país, Ross Wilson, también se encuentra en el aeropuerto, explicó a Efe otra fuente del Departamento de Estado.
La compleja operación de traslado al aeropuerto fue recogida por las cámaras de televisión, que capturaron a helicópteros yendo y viniendo de la embajada estadounidense al aeropuerto, mientras Kabul quedaba asediada y después controlada por los talibanes.
El jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, insistió el domingo en que la situación en Kabul no era como la de Saigón en 1975, a pesar de que en esa ciudad hubo una evacuación aérea del personal de la embajada en Vietnam que fue prácticamente idéntica a la de Kabul, con helicópteros en la azotea.
Estados Unidos planea evacuar de Afganistán a la mayoría del personal de su embajada en Kabul, y dejará en el país apenas a una «presencia diplomática mínima» compuesta por Wilson y otros pocos asesores, según el Departamento de Estado.
El portavoz del Pentágono, John Kirby, aseguró este domingo a Efe que Estados Unidos ha evacuado ya «a varios cientos de civiles, incluido personal (de su embajada) y ciudadanos estadounidenses» que estaban en Afganistán.
Para reforzar esa operación, el Pentágono autorizó este domingo el envío de 1.000 soldados más a Kabul, lo que significa que, en un plazo de 48 horas, habrá «aproximadamente 6.000» militares estadounidenses en el aeropuerto de la capital afgana, confirmó Kirby.
Además, las fuerzas estadounidenses han «asumido» las riendas del control del tráfico aéreo en el aeropuerto de Kabul, para facilitar sus evacuaciones y las de sus aliados, y el tráfico de aviones comerciales en el mismo continúa, añadió ese portavoz.