Washington.- Estados Unidos suspendió las operaciones de su embajada en Bielorrusia y permitió la salida del personal no esencial y sus familias de su legación diplomática en Moscú, informó este lunes en un comunicado el secretario de Estado, Antony Blinken.
Según Blinken, Washington tomó esta decisión debido a preocupaciones «de seguridad» derivadas del ataque «no provocado» e «injustificado» de las fuerzas rusas contra Ucrania.
En su cuenta de Twitter, la enviada especial de EE.UU. en Bielorrusia, Julie Fisher, dijo que todo el personal diplomático ya salió del país y colgó una foto de un hombre arriando la bandera estadounidense de la embajada.
«La complicidad de Bielorrusia en la guerra en Ucrania muestra que el régimen ha perdido la soberanía a la hora de tomar decisiones», arremetió Fisher en Twitter.
El Gobierno del presidente bielorruso, Alexander Lukashenko, aliado del Kremlin, es uno de los países vinculados con el conflicto en Ucrania, ya que mantiene en su territorio unos 30.000 soldados rusos, estima la OTAN.
Según dijo un alto funcionario estadounidense a la prensa, Bielourrusia se está preparando para enviar sus propias tropas a Ucrania en ayuda de Rusia, algo que podría ocurrir este mismo lunes.
La presencia diplomática de EE.UU. en la capital bielorrusa, Minsk, ya era reducida debido a recortes de personal y al cierre de la oficina cultural de Washington en esa ciudad y de la sección de la embajada dedicada a la Agencia Estadounidense para el Desarrollo Internacional (Usaid).
La propia Fisher desarrolla sus labores de enviada especial desde Lituania debido a que el Gobierno de Lukashenko le negó el visado para ejercer de embajadora.
En Rusia, el embajador de EE.UU. es el veterano John Sullivan, quien tiene cuatro décadas de carrera diplomática y ejerció como subsecretario de Estado durante tres años.
Sullivan y el resto de diplomáticos de alto rango permanecerán en Moscú, mientras que el personal no esencial podrá dejar el país de manera voluntaria.
El anuncio de Washington sobre sus actividades en Minsk y Moscú se suma al traslado de sus diplomáticos en Ucrania a la vecina Polonia por razones de seguridad.