BAGDAD.– El grupo terrorista Estado Islámico (EI) atribuyó este viernes una explosión en un restaurante de Bagdad que dejó al menos una docena de heridos y que ha sido atribuida por las autoridades a un accidente con una tubería de gas.
«Un grupo de combatientes del Estado Islámico logró penetrar las defensas del Gobierno iraquí y detonó un artefacto explosivo en una agrupación chií frente a un santuario en la zona de Kazimiya, en Bagdad», dijo la agencia Amaq, órgano de propaganda del EI en un comunicado difundido por la red social Telegram.
Según el Ministerio de Interior iraquí, la explosión tuvo lugar la noche del jueves en una tienda del barrio de Al Kazimiya, considerado un lugar sagrado por los chiíes porque alberga el santuario de uno de sus santos.
«A través de los datos del accidente, del monitoreo de las cámaras de seguridad, la naturaleza de las lesiones de los heridos y el análisis de expertos, se llegó a la conclusión de que la causa de este accidente fue la explosión de una tubería de gas en una de las tiendas», informó el Comando de Operaciones Conjuntas iraquí.
Un oficial del Ministerio de Interior indicó a Efe que la explosión había dejado una docena de heridos, aunque diversos medios de comunicación y el propio EI en su comunicado afirmaron que hubo tres muertos y el grupo yihadista elevó además el número de heridos a 20.
En su comunicado, el Estado Islámico aseguró que hicieron detonar su bomba en una reunión de chíies, una rama del islam distinta a la suní a la que pertenece el grupo integrista, «cerca de uno de sus santuarios proselitistas» y acusó al Gobierno iraquí de intentar ocultar la verdadera causa de la explosión.
Aunque hay ataques del EI contra miembros de seguridad y civiles casi a diario, es poco habitual que consigan llevar sus acciones al centro de Bagdad, si bien el pasado 21 de enero perpretraron un doble atentado suicida en un mercado de la capital con 32 muertos y más de 100 heridos.