Redacción.- Esta semana se cumplió un año de la emisión del último capítulo de “Shingeki no Kyojin”, pero su desenlace sigue siendo motivo de debate entre los fans, que se dividieron en dos grupos: los que dicen que fue bueno y los que entienden que fue malo.
El episodio final, que se dividió en dos partes, dejó a los fans con un desenlace difícil y amargo, pero a la vez épico. Escenas como el momento cuando, con una débil sonrisa, Mikasa corta el cuello de Eren, o cuando Armin le promete a este despiadado pero amoroso protagonista, que compartirá el infierno con él, desatan el dolor de los que siguieron la historia de los titanes desde 7 de abril de 2013, cuando inicio el anime.
Con los títulos “Un largo sueño” y “Hacia el árbol en aquella colina”, ambos capítulos finales dan cierre a esta gran historia.
Luego de que Armin y Zeke tienen una conversación sobre el significado de la vida, Armin convence al portador del Titán Bestia para compartir su punto de vista, y los dos recurren a los anteriores portadores de sus titanes para ayudar a la alianza. Es ahí cuando Zeke se materializa sobre el Titán de Eren y permite a Levi que lo mate, lo cual detiene el Retumbar.
Posteriormente, Armin utiliza el poder del Titán Colosal para destruir el Titán Fundador de Eren, liberando al organismo ciempiés, la fuente del poder de los Titanes que se encuentra en la nuca del protagonista, mientras Falco desciende hacia los refugiados de Liberio, reunión que es interrumpida cuando el ciempiés convierte a los eldianos cercanos en Titanes, incluyendo a Jean, Connie y Gabi, para defenderlo.
Reiner, Annie y Pieck se enfrentan a los Titanes y el ciempiés para impedir que reconecte con Eren, mientras él se transforma de nuevo en el Titán Fundador para pelear contra Armin, dejando a Mikasa y Levi como los únicos que pueden derrotar a Eren.
Ambos logran derrotarlo trabajando en equipo, Levi salta desde la espalda de Falco y dispara una lanza trueno para romper la boca del Titán de Eren, dejando así expuesta su cabeza humana en su interior. Dándole la oportunidad a Mikasa de decapitarlo.
En ese momento Ymir, que había sufrido durante más de 1,820 años es liberada de los Caminos y los poderes de los Titanes, así como el ciempiés desaparecen de la faz de la Tierra, devolviendo a los eldianos a su forma humana permanentemente.
Es en ese momento, bajo esta nueva aura de normalidad para los eldianos, Armin, Mikasa y los demás recuerdan conversar con Eren antes de su muerte, donde este reveló que su verdadero motivo era asegurar que sus amigos pasaran de ser vistos como monstruos para las personas en el exterior, a salvadores de la humanidad y así darles la vida larga y plena que él quería que tuviesen en un mundo libre de Titanes.
Tras el momento de duelo, Armin decide llevarse el reconocimiento de matar a Eren, y Mikasa se marcha para enterrar a Eren en Paradis, mientras que el Cuerpo de Exploración y los Guerreros son alabados como héroes por los supervivientes del Retumbar.
Tres años después, tras eliminar al 80% de la población mundial, los Jeageristas refuerzan militarmente Paradis para prepararse frente a potenciales ataques futuros del resto del mundo, mientras que los miembros del Cuerpo de Exploración se convierten en embajadores del mundo para negociaciones de paz en Paradis. Mikasa entierra la cabeza de Eren bajo un árbol, el cual él solía visitar de pequeño y continua visitando su tumba el resto de su vida.
Sin embargo la obra de Hajime Isiyama va mucho más allá, tal como lo muestra la escena post-créditos que deja entrever que la historia de los titanes no termina, pese al sacrificio propio de Eren y de la muerte de millones de personas y que ha generado una oleada de especulaciones y debates entre los seguidores.
Varias generaciones más tarde, una Paradis futurista es bombardeada y destruida en una guerra. Con el tiempo, la isla es conquistada por la naturaleza, en la que aparece un niño solitario y su perro, los cuales se acercan al árbol en el que estaba enterrado Eren. Este árbol ha crecido desde entonces, pareciéndose al árbol original que contenía la fuente del poder de los titanes lo que nos deja con una incógnita ¿La historia continúa?
Esta escena adicional recuerda que quien no conoce su pasado, está condenado a repetirlo e indica Isiyama podría extender su obra en un Paradis, donde sin importar el paso del tiempo, el poder de los titanes nunca desaparecerá.
Lo cierto es que la razón principal por la que el final de esta historia ha divido tanto las opiniones de los fans es la muerte de su personaje principal, pero los que leyeron el manga antes de ver el final del anime, ya sabían como terminaría esta trama, sin embargo, una gran parte de los fanáticos de Eren Jaeger no aceptan su muerte.