Redacción.- Adam Kotas, sacerdote polaco conocido por crear contenido en la red social TikTok, publicó un video donde desmentía su muerte, la cual había sido informada a través de una publicación en Facebook donde se dijo que el ex sacerdote polaco, murió a los 40 años de edad.
Sin embargo, a través de un video, publicado el padre Adam Kotas desmintió su muerte de esta forma.
Con más de un millón de seguidores, Kotas ha captado la atención por sus mensajes religiosos y su estilo particular, pero su camino en la Iglesia Católica ha estado marcado por la controversia y la inestabilidad.
La Diócesis de Santa Rosa, en California, y la Arquidiócesis de Las Vegas informaron que la laicización de Kotas fue aprobada por el Papa Francisco, lo que significa que no puede apelar esta decisión.
Como resultado, Kotas ya no puede celebrar misas ni administrar sacramentos, y le está prohibido utilizar el título de “Padre” o vestir ropa clerical.
En 2021, Kotas abandonó voluntariamente la Iglesia Católica para unirse a la Iglesia Católica Nacional Polaca (PNCC), una denominación separada de Roma desde principios del siglo XX. Sin embargo, en febrero de 2023, tras un corto período en la PNCC, Kotas anunció su arrepentimiento y regresó a la Iglesia Católica.
Su regreso no pasó desapercibido y fue acompañado de una serie de controversias que incluyeron acusaciones de desequilibrio mental y críticas por su estilo irreverente en redes sociales. A pesar de su reincorporación a la Iglesia, la Diócesis de Santa Rosa procedió con el proceso de laicización.
La Arquidiócesis de Las Vegas ha aclarado que los sacramentos celebrados por Kotas durante su tiempo en la Iglesia Nacional Polaca se consideran inválidos desde el punto de vista de la Iglesia Católica, y cualquier acción realizada después de su laicización carece de validez dentro de esta institución.
Mientras Kotas continúa activo en redes sociales, sus declaraciones y acusaciones han generado una gran controversia tanto en el ámbito religioso como en sus seguidores. Aunque su futuro en la Iglesia Católica ha sido sellado, sigue manteniendo una presencia influyente en las plataformas digitales, denunciando lo que él describe como intentos de silenciarlo y censurarlo.