“El que sufre”

Haz, Señor, que cuando yo llegue al dolor y la prueba, no la mire como un castigo que Tú me envías, sino como una oportunidad que me brindas de poderte demostrar que mi amor es serio y que soy consciente del amor que profeso.

Un cordial saludos todos mis queridos lectores.

Ayúdame a ser más cristiano, que por causa de perder su trabajo, o por
causa de perder a un ser querido, aunque uno no lo pierde pues aun saben dónde
está, en que cementerio se encuentra. Cuando uno pierde una moneda no sabe
dónde la puso, pues la perdió, pero si sabemos donde esta nuestro ser querido,
está disfrutando la presencia de Dios.

Señor, ayúdame a ser un cristiano tan consiente,  que me dé cuenta limitaciones, tan valiente,
que no me hunda antes las inevitables dificultades de la vida.

Y tan humilde que llegue a descubrir que sin Ti, nunca sabré llevar mi
cruz de cada día.

Haz, Señor, que cuando yo llegue al dolor y la prueba, no la mire como
un castigo que Tú me envías, sino como una oportunidad que me brindas de
poderte demostrar que mi amor es serio y que soy consciente del amor que
profeso.

Que el dolor, me haga cada vez más maduro, como persona y como cristiano
que me haga más comprensivo con los demás. Y más tierno y más humano, que
cuando el dolor llegue a mi puerta, lejos de hacerme el mártir o de tomar
actitudes de víctima propiciatoria, sepa repartir paz y alegría en medio de los
que me rodean.

Que el dolor me haga cada vez más hijo de Dios, para poder ayudar a los
que sufren en momentos difíciles, al que todos nos debemos enfrentaren la
vida.   

Hasta la próxima y muchas bendiciones para todos.