Un cordial saludo a todos mis queridos lectores.
Siempre estamos inconforme con lo que tenemos. El pobre quiere ser rico, y el rico pobre para no tener ni familiares que no conoce, y le piden. Los solteros quieren estar casados y los casados quieren estar solteros. Los mujeres quieren ser hombres mujeres, ahí yo no voy, estoy muy contento con lo que Dios me dio y soy.
Les quiero contar una historia que llego a mis manos hace unos días: Y he titulado este escrito el
Valor de lo que Tenemos.
Cuentan que un joven se quejaba en una Iglesia al Señor, y le decía: Señor. Tú has hecho a ricos a todos los demás pobres, mientras que a mí no me has dado nada, y me has hecho pobre, ¿Por qué?
Una persona mayor que lo escuchaba le dijo: ¿Tú eres tan pobre como crees? ¿No te has dado cuenta que Dios te dio la juventud y la salud?
Si es verdad, y me siento orgulloso de ello, dijo el joven.
Entonces la persona mayor tomándolo de la mano le dijo: Si te diese mil dólares, ¿Te dejarías cortar la mano derecha?
Ni hablar de eso, le contesto el joven.
Entonces le dijo el anciano: ¿Y la izquierda?
Tampoco respondió el joven, no hablemos de eso.
¿Si te diera un millón de dólares, por tu vista? Prescindirías de ella.
No lo permita Dios. Ni por toda una fortuna daría uno de mis ojos, respondió el joven.
Entonces, ¿de qué te quejas?, le dijo el anciano. ¿No ves la inmensa fortuna que Dios te ha regalado? Pues vete, y no seas desagradecido.
Los dejo con esta lectura tomada del Libro de los Salmos, Capitulo 75, Versos 2 que dice: “Te damos gracias, oh Dios, te damos gracias, invocando tu nombre, contando tus maravillas”.
Hasta la próxima y muchas bendiciones para todos.