Encontrar una solución integral al problema del tránsito en el país, es una tarea titánica que no debe quedarse solo en las grandes avenidas, también debe trabajarse directamente en los sectores populares y sobre todo a nivel educativo; las grandes reformas inician desde abajo.
Y si en las principales vías el tráfico es un caos, en las calles de los barrios ni hablar; en aquellos sectores donde no entra la policía y mucho menos la DIGESETT es común que los vehículos se estacionen en las aceras, que una calle sea de dos carriles sin importar que haya sido diseñada para uno y cuando los niños salen de las escuelas o colegios hay que orar para que un motorista no se los lleve de paso debido a la velocidad e imprudencia.
Ojalá que si hay alguna solución a la vista al desastre del tránsito, esta llegue a los barrios donde viven los hijos de “machepa”, que los anuncios y propuestas no solo abarquen las vías más congestionadas de las ciudades o provincias y que las autoridades se atrevan a meterse en “tierra de nadie”, de lo contrario sería otro paño con pasta a la “selva de cemento” en la que al parecer vivimos.
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