El traslado de personas por la fuerza, generalmente a punta de pistola, es un delito que ha cobrado impulso en las últimas semanas.
El modus operandi es el mismo, varios hombres interceptan y se llevan a las víctimas a quienes intimidan y despojan de todas sus pertenencias, en algunos casos golpeándoles de manera salvaje, y dejándoles abandonadas en lugares solitarios.