Bogotá.- La cifra de líderes sociales y defensores de derechos humanos asesinados en Colombia en 2023 fue de 181, un 16 % menos que el año anterior, según datos publicados este martes por la Defensoría del Pueblo.
Defender los derechos humanos y ejercer un liderazgo social sigue siendo extremadamente peligroso en Colombia y el pasado año le costó la vida a 160 hombres y 21 mujeres, a pesar de la disminución en 34 homicidios respecto de los 215 asesinatos contabilizados en 2022.
«Es una situación inaceptable que cada dos días del año anterior, en promedio, fuera asesinado un líder social o defensor de derechos humanos en Colombia. Cada vida perdida es una tragedia para sus familias, para las comunidades y para la defensa de los derechos fundamentales en el país», aseguró el defensor del pueblo, Carlos Camargo, citado en un comunicado.
Los líderes y autoridades indígenas, junto con los comunales, fueron los sectores más victimizados, con 37 homicidios cada uno, seguidos de los campesinos (13), afrodescendientes (10) y líderes LGTBIQ+ (7).
Además, tres departamentos del país Cauca, Antioquia y Nariño concentraron el 41 % de los homicidios.
Por ello el defensor consideró que hay que «redoblar nuestros esfuerzos para proteger a los defensores de derechos humanos en Colombia. No podemos permitir que el miedo y la violencia silencien las voces valientes que luchan por un país más justo y seguro».
«Es responsabilidad de los entes estatales implementar planes y políticas públicas en materia de prevención y garantías para quienes defienden los derechos humanos», incidió Camargo.
El defensor hizo un llamado a «estrategias focalizadas» en los departamentos con más homicidios y «un trabajo fuerte en los lugares donde los actores armados ilegales se disputan los corredores estratégicos de economías ilícitas».
Desde 2016, cuando se firmó el acuerdo de paz con la antigua guerrilla de las FARC, la Defensoría del Pueblo ha contabilizado 1.294 asesinatos de líderes sociales, siendo el año 2020, con 182 homicidios, el más letal.
Las cifras proporcionadas hoy por la Defensoría el único ente estatal que hace un recuento específico de este tipo de violencia son similares a las de otros organismos, como el observatorio de la ONG Indepaz, que contabilizó 188 asesinatos el pasado año, además del homicidio de 44 firmantes del acuerdo de paz y 94 masacres.