SANTO DOMINGO.- Sumidos en la incertidumbre y la desesperación se encuentran familiares de 35 personas desaparecidas desde el pasado cuatro de abril luego de abordar una embarcación en el municipio de Sánchez, provincia Samaná, con la intención de llegar a Puerto Rico de manera ilegal.
Mientras las autoridades locales aseguran que se trabaja de manera intensa en la localización de los presuntos náufragos.
Al arribar al décimo día sin tener noticias de las personas que abordaron la nave, sus familiares reflejan en su rostros la tristeza que genera la angustia al no saber si aún permanecen con vida sus parientes.
Tal es el caso de María Medina y Antonio Cortorreal, quienes manifestaron que su hijo no tenía necesidad de emprender ese viaje arriesgando su vida.
Aristilia García llora desconsolada al manifestar que cada día sin información, sus esperanzas se desvanecen de volver a ver con vida a sus hijos Ramón y Pedro Tavarez.
Mireya Villa también padece el mismo sufrimiento y se quejó por la poca ayuda gubernamental para localizar a sus parientes.
Ángel Calcaño, de 27 años, fue otro de los jóvenes que se subió a la embarcación que a diez días de haber salido de Sánchez, aún no ha sido localizada.
En tanto que la gobernadora de Samaná detalló la labores de búsqueda que se han desarrollado para localizar la embarcación, tras rechazar que se le haya dado la espalda a la comunidad.
Aunque la demora en ubicar a los náufragos ha quebrantado las esperanzas de algunos, otros deciden aferrarse a la fe de que volverán a ver sanos y salvo a sus seres queridos
Recibe las últimas noticias en tu casilla de email