Como sociedad debemos vernos en el espejo del joven que engañó y timó, haciéndose pasar como héroe que había rescatado 12 personas, tras la tragedia del Jet Set; esto es un claro ejemplo de como los likes y el afán de reconocimiento en una sociedad espectacularizada pueden estar por encima del dolor y la desgracia.
Viendo esa vergonzosa acción ¿por qué no hacemos un mea culpa y construimos una sociedad donde el like no sea lo más importante?; seamos buenos dominicanos, enseñemos a nuestros hijos a respetar el dolor y a ser empáticos, pero para eso debemos predicar con el ejemplo y dejar de aupar figuras que simplemente no aportan nada.
Como país debemos revisarnos e individualmente aportar cada día al menos un grano de arena para mejorar; brindémosle luz a los que no saben nada y creen saberlo todo; porque como diría Víctor Hugo «Si un alma sumida en las tinieblas comete un pecado, el culpable no es en realidad el que peca, sino el que no disipa las tinieblas».
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