Por poco más de dos horas el artista paseó a los amantes de su música por sus más recientes sencillos hasta extrapolarlos a sus éxitos más conocidos como son “Tu jardín con enanitos” y “Cheque al portamor".
SANTO DOMINGO.- No fue con merengue, no fue con bachata, el Palacio de los Deportes del Centro Olímpico Juan Pablo Duarte de Santo Domingo estuvo repleto de los fanáticos de la balada, específicamente de la música del artista español Melendi, quien arribó a suelo dominicano con su gira “Likes y Cicatrices” y enloqueció con un derroche de romanticismo a los que se dieron cita a ese espacio la noche del martes 14 de marzo.
Faltando 15 minutos para que el reloj marcara las nueve de la noche, Melendi subió a tarima con sus músicos y, solo bastó visualizar su presencia para que el público, caracterizado por personas de diversas edades, emitiera un grito al unísono que reflejaba la emoción que sentía al ver al español.
Por poco más de dos horas el artista paseó a los amantes de su música por sus más recientes sencillos hasta extrapolarlos a sus éxitos más conocidos como son “Tu jardín con enanitos” y “Cheque al portamor".
Además de "De pequeño fue el coco", "Un violinista en tu tejado", "Caminando por la vida", "Mirame", "Como una vela" y "Sin remitente".
¿Cómo dejar a Destino y Casualidad? Una pieza muy conocida y que el “hombre” de 44 años canta junto a el dúo estadounidense Ha*Ash. Pues no, el público también pudo disfrutar de ese gran éxito.
Pero no solo sus canciones marcaron la noche, el español llevó a quienes disfrutaron el show a un sinnúmero de anécdotas que, según él, han sido experiencias vividas en carne propia y que ahora le sirven para introducir cada una de sus canciones en sus conciertos.
Un ejemplo de ellas fue la historia de su amigo Pablo, la cual se resume en un hombre que pensaba que no encontraría a su compañera de vida, que sentía que nadie lo miraba, pero que al final dio con “su media naranja” y finalmente se unió en un matrimonio sellado por un amor correspondido.
Con una camisa de cuadros (que luego cambio por un y-shirt negro) y pantalón negro, una vestimenta tan sencilla como su forma de ser (o por lo menos así lo dejó ver), Melendi causó unos segundos de nervios en el público cuando dejó entender que su presentación había terminado cuando las manecillas del reloj marcaron las once en punto de la noche, pero sus fanáticos, con sed de escuchar más, permanecieron insistentes para que el artista volviera a tarima con su equipo y continuara el espectáculo.
Mientras los flashes de los celulares estaban prendidos todos dirigidos hacia la tarima que estuvo acompañada por un juego de luces de diferentes tonos y una pantalla que hacía alusión a que el equipo técnico transmitía el evento en vivo, Melendi sorprendió a los presentes cuando volvió a subir a tarima, pero más sorprendido se mostró él al ver cómo lo aclamaban sus seguidores.
Y ahí sí, tanto el artista como los fanáticos se mostraron más eufóricos los últimos minutos que el Palacio de los Deportes los albergó hasta que llegó la despedida definitiva a las 11:15 de la noche, cuyo cierre fue marcado por su éxito “Lágrimas desordenadas”.
El tour "Likes y cicatrices" es la más reciente apuesta musical de Melendi, la cual ha sido bien recibida por quienes lo siguen.
El concierto en Santo Domingo fue producido por SD Concerts del empresario Saymon Díaz.