Estambul.- El presidente de Turquía, el islamista Recep Tayyip Erdogan, se ha atribuido hoy la misión de «salvar a los palestinos de la opresión de Israel» y ha vuelto a denunciar lo que considera crímenes de guerra contra civiles en la Franja de Gaza.
«Es nuestro deber salvar a nuestros hermanos palestinos de la opresión de Israel, frenar las masacres que se cometen en Gaza a la vista de todo el mundo», dijo el jefe del Estado durante la inauguración de una residencia de ancianos en la provincia de Rize.
«Es nuestra responsabilidad necesaria ante la Historia proclamar en todas partes los crímenes que hemos visto de quienes cometen estas masacres inmorales y despreciables», indicó.
Erdogan ha calificado varias veces de crímenes de guerra los ataques israelíes sobre Gaza en respuesta a los atentados terroristas del grupo islamista Hamás del pasado 7 de octubre en Israel, que dejaron 1.400 muertos (la mayoría civiles), 5.400 heridos y al menos 241 secuestrados.
En represalia, la ofensiva militar de Israel ha dejado casi 9.500 muertos (la mayoría niños y mujeres) y más de 24,000 heridos en la franja palestina.
Turquía convocó ayer a consultas a su embajador en Tel Aviv y el propio Erdogan dijo que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ya no es un interlocutor válido y que así lo planteará ante la Organización de Cooperación Islámica, el foro político más importante de los países musulmanes.
Erdogan también ha negado que Hamás sea un grupo terrorista, como sí los consideran Estados Unidos y la Unión Europea, y ha definido a su brazo armado como luchadores por la liberación del pueblo palestino.
El secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken llega hoy a Turquía, donde discutirá con las autoridades turcas la necesidad de proteger a los civiles en Israel y Gaza, fórmulas para frenar la violencia y para facilitar ayuda humanitaria a la Franja.
En un comunicado, el Departamento de Estado anunció que se hablará también de establecer las condiciones para una paz duradera en Oriente Medio, que incluya la creación de un Estado palestino, una exigencia también de Turquía.