Redacción.- El cierre de la frontera también se refleja en la zona conocida como “El Pequeño Haití” en la capital, donde este sábado eran escasos los comerciantes y clientes de origen haitianos.
Sin su tradicional bullicio, música y gente, así lucían semidesérticas este sábado las calles Benito González, Doctor Hernando de Gorjón y Santomé en el populoso mercado “El Pequeño Haití”, donde convergen comerciantes haitianos y dominicanos.
Al igual que muchos negocios que cerraron, los camiones que transportan mercancías entre ambos países y los minibuses de pasajeros cesaron sus actividades.
Ante los efectos colaterales de las medidas adoptadas por el gobierno, estos haitianos que residen en el país llaman a las autoridades de ambas naciones a sentarse en la mesa del diálogo para que el cierre de la frontera no se prolongue por más tiempo.
A través de un comunicado, varias organizaciones de ambos países rechazaron el cierre total y la militarización de la frontera dominico-haitiana y piden el restablecimiento de la mesa del diálogo.