SANTO DOMINGO OESTE, República Dominicana.- Un centro educativo para niños con problemas mentales lucha para mantenerse sobre ruedas en el sector El Abanico de Herrera, sin embargo con el empeño del personal han logrado cambiar un sin número de vidas.
Aparentan ser niños normales, pero detrás de cada sonrisa se esconde una triste realidad.
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Algunos llegan sin poder caminar y uno que otros sin hablar, aquí en el Centro Educativo Catalina de San Agustín, que fue fundado a finales de los noventas, logran superar sus dificultades.
La hermana Ana Josefa ha sido la directora de la escuela durante la última década.
Dan terapia en el mismo lugar donde dan recreo-aquí los estudiantes se desarrollan físicamente, mientras que otros utilizan el mismo espacio para juegos de aprendizaje.
Alejandro Martínez es un joven de 17 años de edad y es autista. Su padre esta muy orgulloso del cambio en su comportamiento.
Gregorio es uno de los estudiantes que llego al centro con mucha dificultada, sin embargo gracias al empeño de estas profesoras ha podido superar la mayoría.
Para estas profesoras nada es imposible y aunque no cuenten con el apoyo significativo del Ministerio de Educación se dedican a darles otra oportunidad a estos pequeños.