Madrid.- El 40 por ciento de los cerca de quinientos españoles residentes en Ucrania ha abandonado el país o lo está haciendo, aseguró este lunes el ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares.
El Gobierno español recomendó el pasado fin de semana a sus nacionales que abandonen Ucrania en vuelos comerciales ante la «volátil situación de inseguridad» que vive el país, después de que Estados Unidos vea que «hay una posibilidad clara» de que Rusia lance un ataque.
El ministro español, durante una rueda de prensa en Madrid, justificó que España recomendara subir su nivel de alerta y el abandono «temporal» de Ucrania tras compartir sus preocupaciones en el Consejo Atlántico, el órgano de decisión política de la OTAN, donde Estados Unidos representa un aliado con «mayor capacidad de análisis» sobre el terreno.
Albares indicó que los españoles que salen de Ucrania cuentan con conexiones aéreas, ferroviarias y por carretera para hacerlo «con normalidad».
Esta semana están programados 62 vuelos entre aeropuertos españoles y ucranianos, según datos de la empresa estatal que gestiona aeropuertos en España, Aena.
El titular de Exteriores indicó que la embajada en Kiev está plenamente operativa, aunque están estudiando cuál es el personal no esencial, «por si fuera necesario» que una parte abandone también temporalmente el país.
Albares compareció tras una reunión con su homólogo de los Países Bajos, Wopke Hoekstra, para remarcar que «nunca es tarde para el diálogo» con Rusia desde la OTAN y la Unión Europea (UE).
España, en el seno de la UE y de la OTAN, va «invertir todo el capital político» para tratar de que se solucione el conflicto a través del diálogo, «hasta el último momento», porque pese a la «tensión enorme en la frontera» ucraniana, «la guerra no es algo inevitable», afirmó.
Hoekstra coincidió en que «la diplomacia es la mejor baza» para una desescalada pero «también depende de la otra parte, la que ha llevado sus tropas a la frontera».