Especialista advierte sobre prohibir Internet a jóvenes

Niños y la Internet.

Amparo Arango sugirió que ante las facilidades de acceso a la red que ofrecen las tecnologías, los padres y madres tienen que estar alertas ante el acoso sexual infantil o “grooming”.

SANTO DOMINGO, República Dominicana.- La coordinadora de la Unidad Técnica de la Comisión Nacional para la Sociedad de la Información y el Conocimiento (CNSIC), advirtió que el asunto “no es prohibir el Internet a los jóvenes, niños y niñas” como medida de seguridad en el ciberespacio, sino que como padres y madres los adultos tienen que enfrentar el reto de hacer posible que las experiencias cibernéticas sean positivas y provechosas para la juventud, al tiempo que se aprovechan las oportunidades que ofrece el nuevo entorno digital a nivel mundial.

La ingeniera Amparo Arango, también especialista del INDOTEL, hizo sus señalamientos durante la charla sobre “Internet, el ciberespacio y la seguridad” que dictó a cientos de estudiantes del Colegio Claret, en esta capital.

La actividad contó con la presencia de autoridades del prestigioso centro escolar, así como padres, madres y familiares de los estudiantes.

Citó, entre los riesgos que enfrentan los jóvenes, niños y niñas en Internet, el “acoso sexual infantil o “grooming”, el ciberbulling o ciberacoso, el sexting, los contenidos inapropiados o material abusivo, las amenazas a la privacidad y la adicción al Internet.

En ese sentido, la especialista manifestó que como padres y madres de la actual generación tienen la responsabilidad de “garantizar la seguridad de los hijos” ante los citados riesgos. “No es asunto de prohibir Internet, es conocer para orientar y generar confianza en los hijos y que ellos puedan expresar sus dudas o preocupaciones ante cualquier situación sospechosa”, enfatizó.

Arango insistió en que el problema no es prohibir el Internet a este sector de la población, sino que es necesario “educar en el uso responsable, seguro y ético del Internet”. “Si conocemos los peligros –agregó- podemos establecer reglas claras y hacerlas cumplir, igual que en el mundo real”.

Sostuvo que el reto como padres y madres tiene que ser “aportar nuestros conocimientos y experiencias para hacer posible que las vivencias cibernéticas de nuestros jóvenes y niños y niñas sean positivas y provechosas y puedan aprovechar las oportunidades que ofrece el nuevo entorno digital”.

Significó que las nuevas tecnologías constituyen novedosos espacios de interacción social, pero también nuevos desafíos. Se refirió específicamente a la Web 2.0 que dijo es un modo de usar el Internet de forma participativa a través de buscadores como Google, Twitter, Facebook, Blogger, Linked in, You Tube, flickr, entre otros.

Definió el ciberespacio como un nuevo espacio de socialización, público y con poca privacidad, un nuevo plano de la vida de la persona que es virtual porque “une computadoras, celulares, aplicaciones, software, contenidos y personas” con predominio de las redes sociales.

Dijo que el ciberespacio, asimismo, “hace posible encuentros de personas con intereses, preocupaciones o necesidades comunes”.

Amparo destacó que según las últimas estadísticas, “aproximadamente ¼ de los 7,000 millones de habitantes del mundo tiene acceso a la internet y el 86% puede conectarse a las redes de comunicación a través de celulares”.

Apuntó, además, que existen 2 mil millones de páginas web accesibles en el mundo, más de 30 billones de piezas de contenido son compartidas (web links, blogs, álbumes de fotos, etc.), que hay más de 750 millones de usuarios en Facebook y más de 250 millones acceden a la red por celular, mientras existe más de 100 millones de usuarios de Twitter.

Indicó que esa realidad se presentaba hace poco como algo del futuro, pero que ya en el presente hay incluso niños que acceden y manejan el IPAD como parte de su actual cotidianidad.

La especialista se refirió a los llamados “nativos digitales” que dijo son los niños y jóvenes de esta generación que nacieron con el Internet y que hacen uso de esta tecnología totalmente diferente a los usos que le dan los adultos.