SANTO DOMINGO. La Policía Nacional resolvió con agilidad un delito que atentó contra la sociedad dominicana. El segundo robo a una sucursal bancaria en menos de diez días.
Un crimen que a la mirada de los expertos de las redes sociales, parecía orquestada por un comando bien entrenado, pero de acuerdo con las averiguaciones de los verdaderos investigadores fue planificado por tres hermanos, un primo y amigo de ellos una semana antes.
La fuga no fue compleja, amén de que las autoridades hicieron su trabajo. Facilitó que se pudiera dar con ellos el sistema de cámaras público y privado que se ha ido desarrollando. Pero también ayudó la simplicidad de pensamiento de los asaltantes. Uno de ellos, Johan Eduardo Belliard Aybar, «guardó» su motocicleta en los alrededores de uno de los lugares mejor vigilados del país: la Junta Central Electoral. Y otro decidió ir directo a su casa en motoconcho, Eddy Manuel Segura Arias.
Sin embargo, en esta investigación queda por aclarar las muertes de Richard Michel Estrella Arias, de 25 años, muerto a tiros en un motel, de acuerdo con la Policía. Y las de Belliard Aybar, en su vivienda.
En el caso de Belliard Aybar los familiares, y la pareja de la víctima, han dado versiones que contrastan con la historia de la Policía Nacional. Sobre todo, porque aseguran que el hombre fue capturado vivo por agentes de la institución.
En ambos casos, la Policía sostiene que resultaron muertos después de atrincherarse contra los agentes la madrugada del jueves en acontecimientos separados.
Es del Ministerio Público la responsabilidad de llevar a cabo esas investigaciones.
El asalto a la sucursal del Banco Popular en el sector Las Praderas de Santo Domingo capturó la atención del público por la complejidad de las respuestas mediáticas y las estrategias de defensa del principal acusado, Jorge Luis Estrella Arias.
Una vez que se hicieron públicas las muertes de dos miembros de la banda a manos de la Policía Nacional, Jorge Luis Estrella Arias, el supuesto cabecilla y único prófugo en ese momento, decidió hacer pública su ubicación y declaró que no estaba armado. En un intento por proteger su vida, utilizó las redes sociales y medios de comunicación populares para transmitir su mensaje.
Estrella, identificado por la Policía como un individuo con formación militar y experiencia como instructor en un campo de tiro, envió un mensaje a través de Instagram y X (anteriormente Twitter): «No fue Torni», para asegurar su desarme y alegar la inocencia de su hermano Richard Michel Estrella Arias, abatido por la Policía.
Jorge Luis, quien también fue modelo de videos musicales, tenía una cuenta en OnlyFans y participó en el programa «Buscando un novio para Cheddy», el pasado de José Luis rápidamente lo convirtió en un objeto mediático, resaltando aspectos intrascendentes de su vida que desviarían la atención del crimen grave que se le imputaba.
El Ministerio Público presentó en la solicitud de medida de coerción una versión detallada del asalto, indicando que Jorge Luis Estrella lideró la incursión en el banco, encañonando al agente de seguridad y liderando el robo.
Inclusive llegó a golpear al menos a una de las víctimas dentro del banco antes de huir con el dinero.
Esta narrativa contrasta con la defensa de Estrella Arias, que declaró a los medios de comunicación que fue una víctima de coacción. Supuestamente actuó bajo la amenaza de uno de los fallecidos, Johan Eduardo Belliard Aybar, el único de los implicados que no es primo o hermano.
Este miércoles debe ser presentado por el Ministerio Público la solicitud de medida de coerción del quinto implicado, Alberto Ezequiel Estrella Arias, hermano de Jorge Luis y Richard Michel. La Policía lo identifica como la persona que rentó la yipeta negra Kia Sorento para cometer el robo.