REDACCIÓN.- Estrellas de la música latina se sumaron hoy a la corriente de protesta contra el acoso sexual en la industria del espectáculo al desfilar con vestidos negros por la alfombra de la trigésima edición de los Premios Lo Nuestro, que se entregan esta noche en Miami.
«Tenemos que unirnos», afirmó la cantante puertorriqueña Olga Tañón, una de las artistas homenajeadas de la noche, que escogió un vestido negro con toque victoriano para sumarse al movimiento #MeToo (Yo también) que enlutó las recientes alfombras de los premios Globos de Oro y Bafta.
Como la merenguera de fuego, la cubanoestadounidense Gloria Estefan y la italiana Laura Pausini apostaron por el negro, al igual que Angélica Vale, acompañada de su madre, la icónica actriz mexicana Angélica María, que, sin embargo, se enfundó en un elegante traje de tono púrpura.
Las pocas excepciones llegaron con los artistas más jóvenes, como la brasileña Anita, quien escogió un estampado verde y amarillo «para reflejar los colores de la bandera de su país.
También de negro, desfilaron muchos hombres, como el boricua José Feliciano, el venezolano Chyno Mirando, y los reguetoneros Maluma y JBalvin, que se sumaron a la tendencia de sobriedad con trajes formales.
«Hay momentos para todo y en este momento me pareció importante mostrar respeto», declaró a Efe J Balvin.
Los hombres más jóvenes, como el cantante mexicano Luis Coronel y Bad Bunny, fueron los que ofrecieron los modelos más inesperados, incorporando flores, texturas brillantes y cuadros tradicionales con diseños diferentes.
Pero más que el tradicional desfile de moda, la alfombra Magenta de los Premios Lo Nuestro fue escenario del reencuentro de artistas de la talla de los merengueros Johnny Ventura y Wilfrido Vargas.
«En esta alfombra nos estamos encontrando con muchos viejos amigos», indicó el salsero nicaragüense Luis Enrique mientras abrazaba a Ventura. «Es la verdadera celebración».
La edición del trigésimo aniversario de Premio Lo Nuestro se celebra en el American Airlines Arena de Miami.