La Paz.- El expresidente y líder del oficialismo, Evo Morales (2006-2019), acusó este viernes al nuevo ministro de Justicia de Bolivia, César Siles, de estar relacionado con supuestos casos de corrupción además que lo culpó de ser el responsable de su inhabilitación como candidato al Senado en las elecciones de 2020.
Morales aseguró que el nuevo ministro de Justicia «está también comprometido en casos de corrupción, uno de ellos, tiene relación con la compra de una casa para la familia Choquehuanca (vicepresidente del país)» y que con el nombramiento de Siles se busca la detención de varios dirigentes que son leales al exgobernante.
En la víspera, el presidente Luis Arce posesionó a Siles como nuevo titular de Justicia en reemplazo de Iván Lima, quien renunció de forma «irrevocable» al cargo en medio de la pelea que enfrenta al Gobierno con la facción del oficialismo que respalda a Morales.
La renuncia de Lima ocurrió después de que Morales exigiera al Gobierno de Arce el cambio de los ministros de la Presidencia, María Nela Prada; de Gobierno (Interior), Eduardo del Castillo; de Obras Públicas, Édgar Montaño, y también de Lima.
El exmandatario dijo que la designación de Siles «responde a un cuoteo político» del bloque del vicepresidente David Choquehuanca, puesto que el ministro trabajó en el ministerio de Exteriores, y lo señaló de ser el «principal autor» de su inhabilitación.
Y es que después de la crisis política de 2019, que para Morales y el oficialismo fue un golpe de Estado en su contra luego de las frustradas elecciones de ese año, el exgobernante abandonó la presidencia y salió del país hacia Argentina, cumpliendo la función de jefe de campaña del Movimiento al Socialismo (MAS) desde el exterior.
Para los comicios de 2020, con Luis Arce como candidato presidencial del MAS, Morales buscó llegar al Senado boliviano, pero su postulación fue desaprobada por el Tribunal Electoral al no demostrar residencia en el país.
Morales, líder del oficialista Movimiento al Socialismo (MAS), dio el lunes un ultimátum a Arce exigiéndole el cambio de varios ministros «si quería seguir gobernando» y calificó a los funcionarios de «narcos, corruptos y drogos».
Arce y Morales están distanciados desde finales de 2021 por el control del MAS y el Ejecutivo, pugna que se profundizó ante la necesidad de renovar la dirección nacional del partido oficialista, aún en manos del exgobernante.
Tras liderar una caminata de 187 kilómetros por el Altiplano, Morales exigió el lunes al Gobierno que resuelva problemas como la falta de dólares y combustibles, pero además exigió que sea habilitado como candidato presidencial para las elecciones de 2025, a pesar de una prohibición constitucional.
El Gobierno considera que la marcha fue el inicio de un plan para derrocar a Arce, con la intención de que Andrónico Rodríguez, titular de la Cámara de Senadores, asuma la presidencia del país, y Evo Morales, de quien es afín, sea habilitado como candidato.