Washington.- La Cámara de Representantes estatal en Tennessee, de mayoría republicana expulsó este miércoles a dos legisladores demócratas por haber interrumpido sus actividades la semana pasada para unirse a unas protestas para pedir mayor control de las armas.
Los congresistas Justin Jones y Justin Pearson, ambos afroamericanos, fueron expulsados tras dos votaciones distintas. Una tercera votación para expulsar a la legisladora Gloria Johnson no alcanzó el apoyo suficiente.
Es la tercera vez en la historia del estado, desde el siglo XIX, que se expulsa a miembros de la Cámara de Representantes por presuntamente violar las normas del hemiciclo.
Los tres políticos se unieron la semana pasada en una protesta en donde centenares de estudiantes y profesores llenaron el hemiciclo para urgir a los legisladores a aprobar leyes de control de armas tras un tiroteo escolar que mató a tres niños y tres adultos en Nashville, capital del estado.
Los legisladores demócratas decidieron sumarse a los cánticos de los manifestantes que estaban en la galería y, según medios nacionales, gritaron a través de un megáfono «Poder para el pueblo».
Por ello, los republicanos de la Cámara de Representantes presentaron este lunes una resolución para Johnson, Jones y Pearson, señalando que esos tres legisladores «provocaron desorden y deshonor a sabiendas e intencionadamente» en la sala.
En un comunicado, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, reaccionó a la expulsión de los legisladores y describió la votación como «chocante, antidemocrática y sin precedentes».
«En lugar de debatir el asunto estos legisladores republicanos han optado por castigar, silenciar y expulsar a los representantes elegidos por el pueblo de Tennessee», subrayó Biden y repitió al Congreso su pedido para que apruebe la legislación que restringa la venta de armas.
Este jueves, los manifestantes regresaron a las puertas de la Cámara Baja de Tennessee para apoyar a los demócratas que se enfrentan a esta posible expulsión.
Pearson agradeció a los manifestantes que subieran a un autobús a las 03:00 de la madrugada para «ser parte de este proceso» y asegurarse de que sus voces «sean escuchadas». Ese poder, aseguró, es clave para que puedan «seguir elevando los problemas de la comunidad».
Según un informe de la oficina del fiscal general del estado, el Parlamento de Tennessee solo ha expulsado en dos ocasiones a miembros de la Cámara.
El legislador demócrata Maxwell Frost, firme defensor del control de armas y primer miembro de la generación Z en conseguir un escaño en el Congreso federal, catalogó la votación como una «respuesta extremista e indebida»: «Nos oponemos a estos flagrantes abusos de poder», escribió en Twitter.
Durante las protestas de la semana pasada, Jones gritó «¡Sin acción, no hay paz!» con una pancarta con el mensaje «Proteged a los niños, no a las armas», mientras que Pearson habló sobre la violencia de las armas a través de un megáfono.
El líder de la Cámara de Representantes de Tennessee, Cameron Sexton, lo calificó de «insurrección» y aseveró que los demócratas habían cometido «múltiples violaciones» de las normas de la Asamblea General.
Pearson escribió una carta el mismo día a todos los legisladores donde admitía que había roto el decoro, pero añadió que «era imposible escuchar los cánticos, las súplicas y los gritos de miles de niños pacíficos fuera de nuestras cámaras y no hacer ni decir nada».