SANTO DOMINGO, República Dominicana.- A un año del asesinato del teniente coronel César Augusto Ubrí Boció, sus familiares esperan que se castigue a los responsables de su muerte.
Durante una misa celebrada en la iglesia Don Bosco por la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), institución a la cual pertenecía Ubrí Boció, el sacerdote Néstor Paso pidió a las autoridades trabajar para frenar la inseguridad de los ciudadanos ante la delincuencia que afecta el país.
La señora Miriam Montero Quezada, viuda del asesinado ayudante del actual presidente de la DNCD, dijo que “nosotros confiamos en que habrá justicia”, al tiempo de indicar que los familiares “sentimos satisfacción por el trabajo que han hecho las autoridades” (DNCD, Policía y Fiscalía del Distrito Nacional) para que el caso se esté ventilando en este momento en el Primer Tribunal Colegiado.
Ubrí Boció fue ultimado a cartuchazos el 18 de febrero de 2011, en el sector capitalino de Las Praderas, durante un asalto que habría sido perpetrado por el ex cabo policial Wáscar Cavallo Montero y Michael Antonio Valdez Castillo.
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