Fe y Vida: “Los Amigos son hechos de Pedazos”

Un cordial saludo a todos mis queridos lectores.

Son muy importantes los pedazos de tiempo que vivimos con cada persona. No importa la cantidad de tiempo que pasamos con cada amigo, lo importante es la calidad del tiempo que vivimos con ellos. Cinco minutos parecen muy poco, pero pueden tener una importancia mayor que un día entero, porque lo que vale es la calidad y no la cantidad.

Es muy cierto que algunas amistades son hechas de risas y dolores compartidos; otras de horas de escuela, de compartir juntos en un mismo salón, otras de salidas juntos al cine, diversiones; pero están aquellas que nacen y no sabemos por qué. Tal vez sea del silencio comprendido, o de la simpatía mutua sin ninguna explicación.

Hoy día era del internet y los correos electrónicos muchas amistades son de los e-mails y esas no son menos importantes. Son diferentes, pero no son menos importantes. Tenemos que aprender a amar a las personas y a no juzgarlas por su apariencia o por su modo de ser, no podemos etiquetarlas a todas por igual.

Les cuento una historia que llego a mis manos y dice así: Hace muchísimos años, un joven recién casado estaba sentado en un sofá en un día caluroso y húmedo, bebiendo jugo helado, durante una visita a su padre. Mientras conversaba sobre la vida, el matrimonio, las responsabilidades y las obligaciones de las personas adultas, el padre revolvía pensativamente los cubos de hielo de su vaso y lanzó una mirada clara y sobria hacia su hijo. Nunca olvides a tus amigos, le aconsejó, serán más importantes en la medida en que vayas envejeciendo. Independientemente de cuanto ames a tu familia y los hijos que por ventura vayas a tener, tú siempre necesitarás de amigos. Recuerda ocasionalmente salir con ellos, realiza actividades con ellos, telefonéales. 

¡Qué extraño consejo!, pensó el joven. Acabo de ingresar al mundo de los casados, soy adulto y con seguridad, mi esposa y la familia que iniciaremos serán todo lo que necesito para dar sentido a mi vida. Con todo el obedeció a su papá; mantuvo contacto con sus amigos  y anualmente aumentaba el número de ellos. Con el pasar de los años, él fue comprendiendo que su padre sabía de lo que hablaba. 

En la medida en que el tiempo y la naturaleza realizan sus designios y misterios en un hombre, los amigos resultaron baluartes de su vida. Recordemos que hay amistades profundas que fueron creadas así. Saint-Exupéry decía: “El tiempo que perdiste por tu rosa hace que tu rosa sea tan importante” Yo siempre he dicho que el tiempo que perdemos con cada amigo hace que cada amigo sea muy importante, porque el tiempo perdido con amigos es tiempo ganado, aprovechado y vivido. Son recuerdos para cinco minutos después, para dentro de un año o para siempre.

Yo, que ya paso los 69 años de vida, te diré que he aprendido con el correr de la vida y el tiempo lo siguiente: El tiempo pasa. La vida continúa. La distancia separa. Los niños crecen. Los hijos dejan de ser niños y se independizan, a los padres se nos parte el corazón pero los hijos se van separando de los padres. Los empleos van y vienen. Las ilusiones, los deseos, la atracción, el sexo, se debilitan. Las personas no hacen lo que deberían hacer. El corazón se rompe.

Los abuelos y padres mueren. Los colegas olvidan los favores. Las carreras terminan. Mas, los verdaderos amigos, siempre están ahí, no importa a cuánto tiempo o a cuantos kilómetros se encuentren.

Recordemos siempre que un amigo se torna importante para nosotros, y nosotros para él, cuando somos capaces en su ausencia de reír o llorar, de sentir nostalgia, pena o alegría y en ese instante traerlo bien cerquita de nosotros.

Lo importante es saber aprovechar al máximo cada minuto vivido y atesorarlo después en el baúl de los recuerdos, para tener tiempo para pasar con los amigos, aún cuando estén lejos de nuestros ojos.

Yo junto todos los días pedacitos en una cajita bien dentro de mi corazón. Esos son mi tesoro, y en los momentos tristes, armo amigos que me acompañen…y doy las gracias a Dios por el pedacito que ellos me donaron.

Termino con este Versículo tomado de San Juan, Capitulo 15, Versículo 13 que dice: “Nadie tiene mayor amor que aquel que da la vida por sus amigos”.

Hasta la próxima y muchas bendiciones para todos.