Por: Gabriela Andujar
SANTO DOMINGO.- Con un funeral sencillo, como él lo pidió, la iglesia Católica y sus feligreses velaron este jueves en la parroquia San Juan Bosco los restos del padre Luis Rosario, cuya labor con la niñez y juventud es recordada por varias generaciones de dominicanos.
Pasadas las 10 de la mañana iniciaron los actos fúnebres en memoria del padre Luis Rosario. Al recordar sus obras y proyectos en favor de los jóvenes y niños más desposeídos, los salesianos llamaron al gobierno a mantener las ayudas sociales a los desamparados que deambulan en las calles.
Al indicar que desde la Casa de la Juventud, darán seguimiento a los trabajos del padre Rosario, miembros de la pastoral juvenil pidieron a los legisladores que debaten el Código Penal, mantengan el respeto a la vida y a la familia, en memoria del párroco.
Abanderado de la sencillez mientras vida tuvo, el cuerpo del coordinador de la Pastoral Juvenil, fue velado en un ataúd poco lujoso, acompañado de no más de dos coronas de flores.
El padre Rosario, en su carta también pidió que el coro de la homilía esté formado por muchachos de la calle aunque desafinen y así fue, antes de trasladar sus restos al cementerio Cristo Redentor, Jonseph un joven rescatado, quien desde los 4 años fue acogido por la Casa de Juventud, entonó la última canción de cuerpo presente.
La carta:
El padre dejó una carta especificando como quería su funeral y sepelio.
En ese escrito, pidió un ataúd lo más sencillo posible, sin honores ni mucha rimbombancia.
“No quiero flores (tal vez una o dos rosas). Los muertos casi se ahogan con una colección incontrolable de arreglos florales, costosísimos y de poco valor, si se usa la balanza del corazón. Ese dinero podría utilizarse para comprar alimento para tantos niños y niñas abandonados, acogidos, con grandísimo sacrificio, por gente que se han entregado a hacer de zánganos de padres irresponsables, por amor a la vida.
También dijo que le gustaría que:
“La gente que me acompañe hasta el lugar de mi último descanso, no vaya con traje, menos aún de color negro. Además del calor que hace en los cementerios, le daría demasiado caché al acontecimiento. Las camisas y los poloshirts son más cómodos y más “transparentes”; esto en relación a las actitudes sinceras de amistad. Que no se les ocurra tampoco llevar lentes de color oscuro; me huelen a hipocresía”.
El religioso además pidió al presidente que en lugar de decretar tres días de luto por su fallecimiento que mejor envíe al congreso un proyecto de ley que declare una amnistía para dar facilidades a personas sin documentos de identidad, entre otras.
El sacerdote dedicó la mayor parte de su labor pastoral a luchar a favor de la niñez y la juventud a través de la pastoral juvenil de la iglesia católica.
El padre Luis Rosario se ganó el cariño y respeto no sólo de los miembros de la Congregación Salesiana, sino de diversos sectores del país al haber dedicado parte de su vida a abogar por la protección a los niños y adolescentes a través de la Pastoral Juvenil.
Nacido en Moca el primero de enero de 1945, Rosario defendió “siempre el valor de la vida” y “será recordado siempre por su sensibilidad humano”, de acuerdo con su Congregación.