Ocurre que el Presidente de la República designó a Gedeón Santos al frente de Indotel, institución estatal. Gedeón, peledeísta desde chiquitico, ha sido uno de los crítico más firmes de la corrupción (de la propia y de la ajena), que tiene en el nepotismo una de sus expresiones más descaradas. Y he aquí que Gedeón, dirigente político que siempre ha sido respetado y se respeta, lo primero que hizo fue cancelar a un hermano que trabajaba allí. Simplemente por ser hermano suyo. Gedeón sienta un saludable ejemplo que debemos aplaudir (aunque desde su propio partido le saquen la lengua).
Recibe las últimas noticias en tu casilla de email