Un cordial saludo a todos mis queridos lectores.
Hablar es fácil, pero callar, se requiere mucha prudencia y dominio. Cristo como hombre estuvo callado vivió en silencio e ignorado durante 30 años. Nos dio los siguientes ejemplos:
Hablar oportunamente, es ACIERTO.
Hablar ante una injusticia, es VALENTÍA.
Hablar para defender, es COMPASIÓN.
Hablar para ayudar a otros, es CARIDAD.
Hablar de sí mismo, es VANIDAD.
Hablar aclarando chismes, es OBLIGACIÓN.
Hablar debiendo callar, es NECEDAD.
Hablar de Dios, significa MUCHO AMOR.
Habla de Dios a tiempo y a destiempo, sigamos su ejemplo.
Hasta la próxima y muchas bendiciones para todos.