SANTO DOMINGO.- El senador por Santiago Rodríguez y dirigente choferil, Antonio Marte, denunció que las rutas de motoconcho están siendo aprobadas en zonas donde operan corredores de autobuses, lo que genera conflictos en el sistema de transporte público y afecta la viabilidad de estos proyectos. Según Marte, estas autorizaciones están siendo otorgadas por el Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (Intrant), lo que pone en entredicho la planificación del transporte en el país.
En sus declaraciones, Marte señaló que las rutas de motoconcho deberían funcionar como alimentadoras de los corredores de autobuses, en lugar de competir directamente con ellos. Sin embargo, denunció que esto no ocurre debido a la permisividad de las autoridades encargadas.
«Hay una mujer en el Intrant que actúa por orden del presidente que vive autorizando rutas de motores», declaró Antonio Marte.
“El Intrant está aprobando rutas de motoconcho en los mismos lugares donde se supone que deben operar los autobuses. Esto no tiene sentido. ¿Cómo vamos a organizar el transporte si una cosa interfiere con la otra?”, cuestionó.
El legislador agregó que esta falta de coordinación afecta directamente el desarrollo de los corredores, un proyecto que busca modernizar el transporte público en el país, pero que enfrenta desafíos por el desorden en las calles y la proliferación de motoconchos en zonas urbanas.
Marte hizo énfasis en que estas decisiones son tomadas por el Intrant. Según el dirigente choferil, el Intrant debe garantizar que las aprobaciones de rutas de transporte estén alineadas con las políticas de modernización, en lugar de fomentar la competencia desleal entre diferentes tipos de transporte.
“No estoy en contra del motoconcho, pero tiene que haber un orden. No podemos permitir que los corredores de autobuses, que son una solución al caos, estén siendo desplazados por rutas aprobadas sin lógica ni planificación”, afirmó Marte.
El senador explicó que los motoconchos, al operar en las mismas rutas que los autobuses, generan una competencia directa que afecta la rentabilidad de los corredores y desmotiva a los operadores de autobuses a invertir en la mejora del servicio.
“La idea de los corredores es tener un transporte organizado, con autobuses modernos y eficientes. Pero si los motoconchos están haciendo la misma ruta, ¿qué incentivo hay para mejorar el servicio? Esto es un retroceso”, lamentó.