Afirman RD vive ola de violencia agravada por pandemia

Para los especialistas de la conducta las acciones violentas que se han registrado desde el fin de semana en varios puntos del país, es una forma de expresar lo que sienten como consecuencia de la pandemia

SANTO DOMINGO.- La masacre de Higüey y otros hechos de violencia que dejaron más de una decenas de muertos durante el fin de semana y los enfrentamientos con armas de fuego, puños, machetes y botellazos en diversos fiestas, revelan que el país vive una nueva ola de violencia agravadas por la crisis económica, el desempleo y la sensación de confinamiento, según especialistas consultados por SIN.

 

Los actos violentos que han llevado luto a familias desde el fin de semana, y en diferentes escenarios, son consecuencia del confinamiento producto de la pandemia, entre otros motivos,  en opinión de especialistas de la conducta,  que lo atribuyen además a situaciones emocionales que previamente pudieran tener los victimarios.

Carmen Ramírez explica además que para eliminar la violencia intrafamiliar, suicidios y homicidios como los que recientemente ocurrieron, la comunicación en las casas debe estar guiada por el respeto y la igualdad.

En los denominados teteos o fiestas clandestinas de sectores populosos y negocios nocturnos de la capital también se han registrado escenas violentas que han quedado captadas en videos.

De acuerdo con moradores de sectores como San Carlos y Villa Juana, ese comportamiento se debe a la ingesta desmedida de alcohol.

Con la masacre de Higüey seis personas murieron y otras seis resultaron heridas en manos de un hombre que cayó abatido por la Policía.

Mientras que en Santiago cuatro hombre murieron a tiros en hechos separados.

La mañana del lunes un coronel de la Policía hirió a su esposa en San Cristóbal y luego se suicidó en frente a una iglesia en Haina.

Los especialistas de la conducta exhortaron a las familias buscar ayuda profesional ante cualquier problema o comportamiento que inciten a la violencia para evitar situaciones lamentables.