CIUDAD DE GUATEMALA.- La defensa de Luis Enrique Martinelli Linares, hijo del expresidente panameño Ricardo Martinelli (2009-2014), interpuso varios recursos legales en Guatemala para intentar detener su extradición a Estados Unidos, según informaron este jueves fuentes judiciales.
Los abogados de Martinelli Linares presentaron tres apelaciones en contra de la decisión del Tribunal Quinto del Organismo Judicial guatemalteco que el pasado 25 de mayo ordenó su extradición a EE.UU., donde es requerido por lavado de dinero por el caso Odebrecht.
De los tres recursos legales presentados, uno de ellos argumenta que existe una «inconstitucionalidad» en el proceso judicial contra Martinelli Linares y los otros dos señalan que el hijo del expresidente panameño cuenta con inmunidad como diputado del Parlamento Centroamericano, según confirmaron a Efe fuentes del organismo judicial.
Luis Enrique, de 38 años, y su hermano mayor, Ricardo Alberto Martinelli Linares, de 40, cuyo proceso de extradición aún continúa, fueron arrestados en Guatemala el 6 de julio de 2020 a petición de EE.UU. debido al supuesto delito de lavado de dinero durante el mandato de su padre.
Los hermanos Martinelli Linares se disponían a abandonar Guatemala en un vuelo privado en aquel momento cuando fueron capturados a solicitud de EE.UU., después de alrededor de un año en paradero desconocido.
Según la acusación de la Fiscalía del Distrito Este de Nueva York, los Martinelli Linares son responsables del delito de conspiración para cometer blanqueo de capitales y dos delitos de ocultamiento de información a ese efecto, entre 2009 y 2015, por cifras menores a un millón de dólares.
La fecha de extradición para Luis Enrique Martinelli Linares será determinada próximamente por las autoridades judiciales del país centroamericano, a la espera de que se resuelvan los recursos judiciales presentados en busca de evitar su traslado a EE.UU.
Ricardo Alberto, cuyo caso se procesa actualmente en el Tribunal Tercero del Organismo Judicial guatemalteco, además, está acusado en Estados Unidos por dos cargos adicionales derivados del gasto del dinero blanqueado.
Los dos ciudadanos de nacionalidad panameña fueron elegidos en 2019 como diputados suplentes al Parlamento Centroamericano por su país, pero nunca llegaron a ser juramentados.