Historia Dominicana: Elupina Cordero, religiosa muy querida por su servicio a los más necesitados  

La señorita Elupina Cordero, fue una religiosa católica muy querida por su servicio a los más necesitados y enfermos. Nacida en Sabana de la Mar el 1ero de Diciembre de 1892

SANTO DOMINGO, República Dominicana.-  La señorita Elupina Cordero,  fue una religiosa católica muy querida por su servicio a los más necesitados y enfermos. Nacida en Sabana de la Mar el 1ero de Diciembre de 1892, ciudad donde, como comentaros mis compañeras, hoy día existe un santuario, un hospital, una calle y un instituto educacional dirigido por la Iglesia Católica y administrado por las religiosas concepcionistas que lleva su nombre.

La señorita Elupina Cordero, como era conocida, quedó huérfana a los siete años, a los doce perdió la visión quedando ciega, sin haber sufrido ninguna enfermedad. Se cuenta que desde entonces nacieron en ella otras virtudes, como las de realizar curaciones a las personas, que acudían de todos los puntos del país en busca de curar sus quebrantos.

Para realizar sus curaciones se afirma que la señorita Elupina sólo tenía que poner su mano en la parte afectada por una dolencia y entonces la enfermedad desaparecía.

Preparaba remedios caseros, lo que hizo que la gente acudiera a ella en busca de las medicinas que preparaba en la botica que tenía en su casa. Pese a que no cobraba nada, pronto tuvo una pequeña fortuna a base de donativos, con los cuales construyó una capilla donde retirarse a orar.

Cuentan que el dictador Rafael Leónidas Trujillo y Molina dijo una vez, que no podían haber dos grades en su país, como él lo llamaba. Este fue con sus militares a someterle personalmente y a su llegada sus militares no pudieron entrar y entro solo y al estar cerca de ella cayó de rodillas ante su presencia, después siempre envió regalos.

Cuenta la leyenda que en los años 30 y 40 hubo un inicio de tsunami, el pueblo corrió a las afueras del pueblo y ella mando a poner unas cenizas y tierra a la orilla del mar, cuando la gran ola venia ahí mismo se detuvo; justo ahí hasta el día de hoy hay una cruz blanca en la calle 27 de Febrero, de Sabana de la Mar.

La señorita Elupina llegó a ser una persona muy querida en Sabana de la Mar, así como en todo el país y su muerte causó gran pesadumbre.

Murió desangrada a causa de una astilla de su bañera de madera que se le clavó en una arteria, el 4 de Junio de 1939, a los 47 años de edad.

Su cadáver fue sepultado en la humilde casa que habitaba y luego se levantó una ermita en ese mismo sitio. Sus restos fueron llevados allí y se cubrieron con una lápida que lleva su nombre. Cada año, el 4 de junio, se reúne en la ermita una gran cantidad de seguidores de esta virtuosa dama, para rendirle un acto o misa en su memoria.