DAJABÓN.- Una jornada de protesta de la iglesia católica se realizó con misas, réplicas de campanas, llamados y marchas por los actos de secuestros a religiosos de Haití además el estado de violencia e inseguridad que se vive en el vecino país mientras que autoridades dominicanas mantienen en la frontera la vigilancia redoblada y comerciantes de nuestro país esperan que esta situación de inestabilidad de Haití no entorpezca las ventas en los mercados fronterizos.
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