Por: Petra Minaya.
Santo Domingo.- Sumidos en la incertidumbre dicen sentirse cientos familias residentes en Gualey, cuyas viviendas han sido censadas en procura de iniciar un proceso de desalojo para dar paso a la segunda etapa del proyecto Domingo Savio que abarcará la rivera del Río Ozama.
La indefinición sobre la suerte que correrán las familias que serán desalojas es la mayor preocupación que tienen los moradores que residen a orillas del afluente.
“No hemos sabido nada, estamos en el aire, sin saber a dónde vamos a parar, ni nada por el estilo”, afirmó Yinette Martínez, residente en Gualey.
Afirman que han censado en numerosas ocasiones, sin embargo, desconocen cuál será la oferta del Gobierno como pago por las expropiaciones.
Algunas de las familias que serán desalojadas prefieren que las autoridades paguen por sus viviendas.
“Si nos dan una casa a donde nosotros no estamos a gusto con esa casa, en el lugar donde no las dan, por eso yo pienso que deben de darnos el dinero mejor y nosotros compramos donde queremos”, expresó Rosa Alcántara, residente en Gualey.
“Me gustaría que me den mi vivienda, yo no hago nada con que me den algo que yo no pueda comprar donde vivir”, relató Yinette Martٕínez.
“Que hagan lo que ellos quieran, nos entreguen vivienda, dinero o como sea, pero que nos saquen de aquí”, indicó Mariam Cruz
Las condiciones de insalubridad se evidencian en cada metro donde están ubicadas las viviendas censadas.
“Cuando llueve el río entra, hay muchos mosquitos, dengue”, señaló Verónica Cordero.
De manera extraoficial, el número de casas censadas para desalojo sobre pasan las ochocientas.
Ahora las familias censadas aspiran que en este mes de diciembre las autoridades establecer cuál será su suerte en este proceso de desalojo y cuándo este iniciaría.