Instituto Duartiano convoca una marcha patriótica para exigir intervención internacional en Haití

El Instituto Duartiano saludó el llamado que, en las últimas horas, formuló la ONU para someter al Consejo de Seguridad la discusión urgente de desplegar una fuerza internacional restaurare la paz social en Haití.

Santo Domingo.- El Instituto Duartiano convocó a una marcha patriótica en Azua con el objetivo de seguir demandando que la comunidad internacional acompañen a Haití a emprender un sostenido proceso de rescate y reconstrucción integral, que incluya su pacificación y restablecimiento institucional.

El presidente del organismo patriótico, Wilson Gómez Ramírez, explicó que la marcha partirá a las 10 de la mañana el sábado 5 de noviembre desde la plaza Enriquillo y recorrerá la calle Emilio Prud’Homme hasta llegar al parque Duarte, con un tributo al padre de la Patria, Juan Pablo Duarte.

“El pueblo sigue haciendo estas demostraciones patrióticas porque entiende que es necesario que Haití logre su levantamiento institucional con el concurso de su propio pueblo, como agente activo de su desarrollo, pero ayudado por los líderes de la comunidad internacional y hemisférica, de los que se requiere ahora como nunca antes un esfuerzo auténtico, consistente y sincero, de rescatar y reconstruir a Haití en Haití”, agregó Gómez Ramírez.

Señaló que esta nueva jornada también se hará con orden, la disciplina y fervor patrio, que se expresará con el ondear de la bandera nacional, durante toda la marcha.

Finalmente, reiteró que el esfuerzo de rescate y reconstrucción que hemos estado demandando de la comunidad internacional, es lo único justo, racional y moral, y es lo que imponen elementales principios del derecho internacional, y es, además, lo que en verdad deseamos los dominicanos en función de nuestros propios intereses nacionales: contar con una nación vecina insular organizada, segura, estable y próspera.

Duartianos saludan llamado al consejo de seguridad de la ONU

El presidente del Instituto Duartiano, Wilson Gómez Ramírez, saludó el llamado que, en las últimas horas, formuló el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Antonio Gutierres, para someter al Consejo de Seguridad la discusión urgente de desplegar una fuerza internacional restaurare la paz social en Haití.

No obstante, Gómez Ramírez, entiende que el acompañamiento tiene que ser integral, pues la vecina nación requiere de otras impostergables e imprescindibles medidas y acciones con la participación del pueblo haitiano como agente activo en este proceso, manteniendo a salvo su autodeterminación.

“Es necesario que Haití reciba la mayor colaboración de la comunidad internacional para que pueda recuperar su institucionalidad, organizar su registro civil, lograr la documentación de su gente, para que tenga un padrón confiable con miras a un proceso electoral seguro y transparente, de manera que del voto popular surjan autoridades con el mayor nivel aprobación y legitimidad”, expresó.

El presidente del Instituto Duartiano manifestó que se tienen que crear las condiciones adecuadas para que en el vecino país haya seguridad jurídica, y por tanto se promueva un clima de inversión de capitales nativo y extranjero, abriendo así la posibilidad de un sostenido crecimiento y desarrollo económico.

“Si bien es cierto que no admite espera que sean inmovilizadas las bandas armadas y se desarmen para establecer mecanismos que permitan el transporte efectivo y seguro de alimentos, medicinas, combustibles y mercancías en general desde los puertos, aeropuertos, la frontera terrestre, entre otros, no menos cierto es que tampoco acepta espera el fortalecimiento institucional y la creación de condiciones que viabilicen el restablecimiento de la institucionalidad en Haití”, dijo.

Gómez Ramírez precisó que “ojalá que la respuesta a la solicitud hecha a la ONU por los que gobiernan en Haití sea respondida en términos amplios, y se evite la reedición de los capítulos escritos entre 2004 y 2017, con la llamada Minustah, que todo se limitó a una simple presencia militar que no condujo a ningún sustancial y los problemas medulares de la Nación haitiana se agravaron, cuestión que mereció severas críticas en Haití y el exterior”.