Beirut.- El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, aterrizó este sábado en el aeropuerto de Alepo, una de las provincias del noroeste de Siria que han sufrido más daños por los seísmos del lunes, para evaluar la escasez de suministros en el país árabe.
«Llegué a Alepo, en Siria, con suministros de salud adicionales para ayudar a la gente de todo el país», dijo Ghebreyesus en Twitter, donde lamentó que los supervivientes de los sismos tengan que enfrentarse a las duras condiciones del frío y el acceso limitado a refugio, comida o incluso agua.
La agencia de noticias oficial siria SANA dijo que el jefe de la OMS llegó con «35 toneladas de suministros médicos vitales necesarios para atender las necesidades básica de las víctimas afectadas por el terremoto».
Asimismo, apuntó que un segundo avión llegará a Siria en los próximos dos días con otras 30 toneladas de equipos y suministros médicos.
El etíope estuvo visitando diversos hospitales y refugios en Alepo con los equipos de la OMS desplegados ahí, así como con el ministro de Salud de Siria, Hasan al Ghobash.
El ministro sirio indicó a SANA que «la visita de Ghebreyesus es importante para evaluar los daños causados por los terremotos y la escasez actual de suministros médicos y medicamentos en los hospitales».
Hasta el momento, la OMS ha proporcionado esa ayuda a las áreas controladas por el Gobierno del presidente Bachar al Asad, mientras que hoy el tercer convoy con ayuda humanitaria de la ONU llegó a las áreas opositoras del noroeste de Siria a través de un paso fronterizo con Turquía.
La visita de Ghebreyesus es la primera de un alto cargo de una agencia de Naciones Unidas, y se produce horas antes de la del jefe de los servicios humanitarios de la ONU, Martin Griffiths, que se encuentra en estos momentos en Turquía.
El director de Emergencias de la OMS para la región del Mediterráneo Oriental, Richard Brennan, dijo hoy en rueda de prensa que la ONU está trabajando para aumentar la ayuda a estas zonas desde Turquía y desde dentro de Siria, por donde esperan ingresar materiales médicos y alimentos tan pronto como reciban «luz verde».
Los seísmos, con epicentro en Turquía, han provocado hasta el momento la muerte de al menos 3.553 personas en Siria y lesiones a más de 5.276 que necesitan ser atendidas con urgencia.