Es conocido que el consumo de bebidas azucaradas es uno de las principales causas que contribuyen al aumento de peso y el desarrollo de enfermedades metabólicas como diabetes e hígado graso.
Cuando hablamos de bebidas azucaradas, ¿a qué nos referimos?
Se considera bebida azucarada aquella cuyo principal aporte es azúcar (pues son hidratos de carbono) y por tanto tiene un valor calórico considerable cuando se consume de forma abundante y frecuente.
Se reconocen dentro de las de mayor consumo: las bebidas carbonatadas (llamadas refrescos o sodas), bebidas energizantes (deportivas o no), té frio, batidas con café, leche endulzada, los jugos o cualquier otra bebida a la que se le añada azúcar.
A los jugos debemos prestarles especial atención, pues se entiende que al incluirse frutas no contienen azúcar si no se les añade de forma adicional.
Recordemos que las frutas son fuentes de azúcar (fructosa), con un aporte de fibras, antioxidantes, vitaminas que invitamos a una recomendación de consumo frecuente (pero no abundante) por sus beneficios en una alimentación equilibrada y saludable.
Entendiendo que son fuentes de azúcar, podemos asumir que al incluirlas de forma adicional a las comidas, añadimos un aporte de azúcar y calorías que debe ser contemplado en su búsqueda de pérdida de peso y/o control de glicemia (azúcar).
Hagamos un ejercicio para entender la idea:
1 naranja mediana (~ aprox. 130g) contiene un valor de 65 calorías (15g de hidratos de carbono). Utilizamos alrededor de 5 naranjas para la elaboración de 1 vaso de 8onz de jugo natural, esto equivale a la siguiente ecuación {65 kcal por 5= 325 Kcal y 75 gramos de hidratos de carbono}. Si se le añade azúcar blanca o morena, miel, leche (ej. morisoñando) estaríamos agregando aún más calorías. ¡Qué sorpresa!
¿Cuáles son las recomendaciones para reducir el consumo de azúcar en bebidas?
Nutrióloga Clínica. Escríbanme sus comentarios a: [email protected], Instagram: dra.erikaperez;
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