REDACCIÓN INTERNACIONAL.- El reciente viaje de Kylian Mbappé a Suecia, que se esperaba fuera una breve y confidencial pausa en su apretada agenda, ha tomado un giro inesperado al convertirse en el centro de una investigación penal. La fiscalía de Estocolmo ha abierto una causa por «abuso sexual» tras una denuncia presentada por una mujer, quien afirma haber tenido una relación no consentida con el astro del fútbol francés. Sin embargo, la abogada del delantero, Marie-Alix Canu-Bernard, ha negado categóricamente las acusaciones.
El hecho habría ocurrido en el lujoso Hotel Bank, luego de una noche de fiesta en la discoteca V, junto a un grupo de amigos, incluido Nordi Mukiele, jugador del Bayer Leverkusen, quien organizó el viaje a través de un conserje especializado en clientes VIP, según reporta el medio Le Parisien. Desde el entorno de Mbappé, se asegura que la relación fue consensuada y que existió comunicación positiva posterior con la mujer.
A pesar de que han pasado varios días desde que se presentó la denuncia, el jugador de 25 años y su equipo legal aún no han sido notificados oficialmente, lo que ha generado expectativa. La defensa de Mbappé se ha mostrado confiada en que las acusaciones no prosperarán y ha enfatizado que «una denuncia no prueba absolutamente nada».
Mientras continúa la investigación, Mbappé sigue entrenando con el Real Madrid, preparándose para enfrentar al Celta de Vigo, aunque las repercusiones de este caso podrían afectar tanto su vida personal como profesional. Además, el caso ha cobrado relevancia mediática en Francia, donde ya había enfrentado críticas por su ausencia en la selección nacional durante la fecha FIFA.
Las autoridades suecas no han ofrecido mayores detalles, pero se espera que el testimonio de Mbappé sea clave en el desarrollo del caso.