Siguen las declinaciones y también continúa en ascenso la abstención y la incertidumbre en las bases, con relación a su participación electoral, en las primarias presidenciales del partido de la Liberación Dominicana.
Saben las estructuras sociales, políticas y operativas de esa parcela política, que la eliminación de su candidato natural por una traba jurídica, es superable, con solo acceder a un derecho independiente del poder político, tanto en la situación de la reelección consecutiva como en el caso del referéndum aprobatorio.
Poner delante la moral política o la doctrina jurídica, tal cual lo hicieran el Comité Central y el Comité Político, sin una pedagogía política del discurso de declinación por eliminación, es el mejor argumento que sustenta socialmente la neutralidad en esa organización.
Permitir que el discurso cayese en los terceros y cuartos planos del debate político, por la inopia y la caducidad dialéctica de las autoridades del partido de Gobierno, es lo que pudiera traer como consecuencia la gran abstención el día de las primarias presidenciales. Cosa que quieren evitar en desmedro del proceso democrático los seguidores del Licenciado Medina.
Sería una gran sorpresa para todos menos para el Doctor Fernández, porque está consciente de que la abstención o la neutralidad es la rebeldía creativa de las bases de ese partido, contra la vacancia de sus propios organismos de dirección, los cuales jamás leyeron ni impulsaron una estrategia, que les permitiera un aprendizaje democrático del proceso político interno, que hoy vive su partido. Después de ver que, ni siquiera leyeran ni conocieran los contenidos políticos del discurso de su Presidente.
Dejaba claro con su oratoria, en un solo párrafo, una sola razón para su declinación, sin embargo, en siete párrafos, al calor de su impedimento constitucional consignado en el artículo 124, decía, que: Tenía en su favor los artículos 110, 210 y 272. Apeló, pues, a las opiniones de juristas y de consultores internacionales para disponer del recurso de la retroactividad de la ley, y de las figuras del referéndum consultivo y del referéndum aprobatorio.
Merecía poca atención, tal vez, el discurso del Doctor Fernández, como medida para atenuar los precios de los combustibles, aunque sirviese para que los políticos, historiadores y sociólogos, de mucha fama en la opinión pública, entablaran un debate sin oficio público y político del mismo, y se concentrasen en la anécdota de Anibal Barca, el fundador de la Provincia de Cataluña, en España.
Encapsulados en su soberbia intelectual y en su erudición histórica, descuidaron que aquel 8 de Abril, eclosionaba un fenómeno social, electoral y político, sin precedentes, la neutralidad. Cuyos antecedentes precedentemente hemos ilustrado.
Tomaba 23 minutos en leer los 71 párrafos de su discurso, el Presidente del partido de Gobierno, más fue incomprendido por todos los organismos y por las ejecutivas municipales, provinciales y federales, tanto nacionales como las internacionales, pero, reproducidas conductualmente y, con mucha excelencia, por las bases autenticas de esa organización.
Será la neutralidad o la abstención esa fuerza poderosa intangible, esa omnipotencia secular, la que tendrán que vencer todos los precandidatos en las primarias. Esa misma energía que tiene a Hipólito Mejía como candidato fuerte en el PRD. Pero, la misma fuerza que, moral y sistemáticamente, han devaluado y despreciado los cientistas sociales, que se les concedía a Juan Bosch, a Peña Gómez y al Doctor Balaguer.
Corremos el riesgo de estar equivocados en nuestras apreciaciones, pero son nuestras ideas sobre la realidad política de las primarias del partido de Gobierno. En todo caso, si se estudia el adoctrinamiento ideológico que, con su estilo, ha implantado el Presidente de esa organización, contrario a todos los otros aspirantes.
Diseñó un novedoso sistema de poder político, social y económico, que se transmite mediante códigos, métodos educativos formales e informales y de costumbres ocultas.
Vencer todo este fenómeno de poder político, social y humano, será el punto crucial. Esa expresividad electoral neutral que hoy es una realidad superior al 55%, la cual se pone de manifiesto, por medio de un sistema de poder estrictamente humano, similar al que reseña de su encuentro con Balaguer, en el párrafo 10 de su discurso.
“Él no estuvo enteramente complacido con mi respuesta, pero, terminó por aceptar mis argumentos”.
Quedaron insatisfechas las bases peledeistas el 8 de Abril, aceptaron los argumentos, pero, crearon su arma política, la neutralidad, con el fin de combatir la comodidad de la burocracia de su partido, y obligarla a sudar los sacos, las corbatas y las camisas, pero, también a gastar las cuelas de los zapatos en los callejones, en la lucha por conquistar el referéndum consultivo y el referéndum aprobatorio: “Por el derecho del Doctor Fernández a ser elegido”.
Recordamos a los lectores, al Comité Político y al Comité Central, que las obras escritas por Martín Lutero, cambiaron el curso del cristianismo y que la literatura del manifiesto comunista modificó la historia del siglo XX. Que paree inocuo este discurso por el carácter interno del mismo, pero es el partido con todos los poderes operantes y operativos del Estado; por lo cual pudiera contener la fuerza histórica y la potencia estremecedora, para mover los cimientos políticos y constitucionales republicanos, por lo que queda del siglo XXI.