La Fiscalía lusa archivó 9 de los 15 procesos abiertos por abusos en Iglesia

Además de los 25 casos remitidos por la comisión de investigación, existen otros procesos en curso sobre abusos en la Iglesia a raíz de diferentes denuncias.

Lisboa.- La Fiscalía portuguesa archivó nueve de los quince procesos de investigación abiertos a raíz de las denuncias remitidas por la comisión de expertos que estudió los abusos en la Iglesia en Portugal y mantiene los otros seis bajo investigación.

Las cifras fueron remitidas este lunes a EFE por la Fiscalía, que explicó que de las 25 denuncias enviadas por la comisión resultaron quince procesos, ya que algunos de ellos concentran varios casos.

De esos quince procesos, nueve fueron archivados porque habían prescrito, faltaban pruebas, no fue posible identificar a los agresores o a las víctimas, los abusos ya habían sido juzgados y condenados, no se encontraron indicios suficientes o, en un caso, el denunciado ya había muerto.

Además de los 25 casos remitidos por la comisión de investigación, existen otros procesos en curso sobre abusos en la Iglesia a raíz de diferentes denuncias.

La Comisión Diocesana de Protección de Menores y Personas Vulnerables entregó cuatro denuncias sobre abusos sexuales, que dieron lugar a siete procesos.

De esos siete, cinco fueron archivados y los otros dos siguen bajo investigación.

Un miembro de la Iglesia Católica remitió otro caso, que fue archivado por haber prescrito, y otras dos denuncias anónimas también fueron archivadas.

Bajo investigación y secreto de sumario se mantienen los dos procesos instaurados por denuncias que fueron recibidas por la Presidencia de la República, que las remitió a la Justicia, y hay otros dos casos redirigidos recientemente al Ministerio Público que están pendientes.

CASI 5.000 VÍCTIMAS

La comisión de expertos creada por la Conferencia Episcopal divulgó la semana pasada su informe final tras un año de investigación sobre los abusos cometidos en el seno de la Iglesia desde 1950, en el que estima que al menos hay 4.800 víctimas.

La mayoría sufrieron abusos cuando tenían entre 10 y 14 años y el 77 % de sus abusadores eran sacerdotes.

Aunque el grueso de los abusos se produjo entre 1970 y 1990, al menos 27 víctimas nacieron después y la más joven tiene hoy 6 años.

La comisión calcula también que hay más de 100 sacerdotes en activo sospechosos de haber abusado de menores en Portugal.