La industria cinematográfica defiende la Ley de Cine como pilar del desarrollo nacional

SANTO DOMINGO. – La industria cinematográfica de la República Dominicana se ha convertido en un motor económico esencial, defendiendo con firmeza la Ley de Cine, que ha sido un factor determinante en su crecimiento. En poco más de una década, esta industria ha generado un impacto económico y social significativo, consolidándose como un sector clave en la economía del país.

Hans García, presidente de Asociación Dominicana de Profesionales de la Industria del Cine (Adocine), Rafael Muñoz, vicepresidente de la productora dominicana Lantica y José María Cabral, director de cine, destacaron que la industria cinematográfica dominicana, ha logrado crear un ecosistema sostenible, formalizado y con un efecto multiplicador en la economía nacional, gracias a la Ley de Cine.

Consideran que este sector no solo genera empleos y riqueza, sino que también fortalece la identidad cultural del país, reafirmando su importancia como un pilar del desarrollo nacional.

Según datos, se han creado más de 25,000 empleos en los últimos tres años, de los cuales el 55% han sido ocupados por mujeres, un reflejo de la inclusión y el desarrollo equitativo que promueve este sector.

Además, el 88% de los proveedores de servicios asociados a la industria cinematográfica son micro y pequeñas empresas locales, lo que refuerza el compromiso del sector con el desarrollo de las MIPYMES y la transparencia en las operaciones comerciales.

Resaltan que el impacto de la industria no solo se mide en términos de empleo, sino también en su capacidad para generar riqueza y formalizar sectores anteriormente informales. Empresas de servicios como estudios de cine, alquiler de equipos, seguridad, catering y otros sectores asociados han experimentado un crecimiento notable, fortaleciendo la estructura económica del país.

Señalan que este crecimiento ha fomentado el desarrollo de una clase media más sólida, ya que los profesionales de la industria cinematográfica reciben salarios competitivos que les permiten mejorar su calidad de vida y contribuir al aumento del consumo interno.