CIUDAD DE MÉXICO.- Es falso que la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, haya participado en un «ritual de brujería» en su toma de posesión, como afirman erróneamente internautas que adjuntan unas imágenes de un segmento del evento en el que se realizó una ceremonia con representes indígenas y afromexicanos.
Tras la juramentación de Sheinbaum, usuarios en redes sociales como Facebook o X compartieron fotos del acto junto a mensajes en los que aseguraban que la dirigente había realizado un ritual de brujería y varias «invocaciones» a espíritus.
«La izquierdista Claudia Sheinbaum inició su mandato presidencial participando en un ritual de brujería», afirma uno de los mensajes localizados en línea, en donde algunos perfiles también aseguraron que se trataba de un «culto a Satanás».
El pasado 1 de octubre, Sheinbaum se convirtió en la primera presidenta mujer del país norteamericano, tras más de 200 años de México como Estado independiente.
HECHOS: No es cierto que Claudia Sheinbaum haya participado en un ritual de brujería durante su juramentación. Las imágenes que circulan en internet muestran el momento en que la gobernante recibió de manos de representantes de pueblos originarios el Bastón de Mando, un objeto ceremonial simbólico para comunidades autóctonas que también fue entregado a su antecesor, tal y como lo demuestra el programa del evento, artículos académicos e informaciones de EFE.
Representantes indígenas reconocieron su elección con objetos ceremoniales
Días previos al acto oficial, el gabinete de comunicación de Sheinbaum dio a conocer el programa de la investidura, en el que indicaba que sobre las seis de la tarde la presidenta recibiría a una “comitiva de cinco mujeres autoridades de los pueblos indígenas y afromexicanos”, quienes entregarían el Bastón de Mando a la mandataria como símbolo de reconocimiento político.
Asimismo, la programación indicaba que en el evento tendría lugar un ritual de «limpia y purificación», tradicional de pueblos ancestrales.
Según una investigación de Milvet Alonso Gutiérrez, doctora de la Universidad de Georgia, el Bastón de Mando es un elemento importante en varias culturas indígenas, pues «simboliza la máxima autoridad, tanto espiritual como política, de quien lo ostenta dentro del sistema de organización comunitaria».
El texto señala que, tradicionalmente, se hace la entrega del objeto «a la autoridad de la comunidad indígena que tiene un cargo político» y representa el «sometimiento» a dicha figura.
De acuerdo con el programa oficial de la juramentación, en el escenario también se situó una ofrenda ceremonial que simbolizaba «la totalidad del universo y los frutos de la Madre Tierra».
Alrededor de ella, se dispusieron «sahumerios» para representar a «los cuatro rumbos» y al centro del universo, elementos clave en la cosmovisión indígena.
Según la información oficial, al invocar los cuatro rumbos los presentes debían tener los brazos levantados y las palmas abiertas para pedir por la «iluminación y sabiduría» de la nueva presidenta, entre otras cosas.
López Obrador hizo la misma ceremonia
El expresidente mexicano Andrés Manuel López Obrador (2018-2024) también llevó a cabo la misma celebración cuando asumió el cargo hace seis años, tal y como lo demuestran imágenes del archivo de EFE.
En dicho acto solenme se realizó un ritual de purificación en el que López Obrador recibió un crucifijo de los representantes de los pueblos indígenas y se arrodilló para recibirlo ante más de 120.000 personas reunidas en la explanada del Zócalo de la capital mexicana.
En conclusión, es falso que Sheinbaum haya participado en un ritual de brujería en su toma de posesión. Era una ceremonia indígena en la que los pueblos originarios le conceden su confianza a la dirigente. EFE