Bruselas.- El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, aseguró este miércoles que no hay constancia de que China haya suministrado ayuda militar a Rusia en la guerra contra Ucrania, pero advirtió a Pekín de «consecuencias severas» si lo hace.
«China sabe que habrá consecuencias severas si entrega ayuda letal a Rusia» y así lo han «dejado claro muchos aliados, incluso el aliado más grande», dijo Stoltenberg, en alusión a Estados Unidos, durante una rueda de prensa al término de la reunión de dos días que han mantenido los ministros de Exteriores de la OTAN, marcada por el ingreso oficial de Finlandia en la organización.
El secretario general de la Alianza afirmó que si Pekín entregase armas a Moscú «sería un gran error», sin bien señaló que, «por ahora, no hemos visto confirmación» de que eso haya ocurrido.
No obstante, dijo que China y Rusia «se han acercado» y, en este sentido, recordó el acuerdo de «amistad sin límites» que el presidente chino, Xi Jinping, y el ruso, Vladímir Putin, firmaron justo antes del inicio de la invasión de Ucrania.
«China se niega a condenar la agresión rusa, se hace eco de la propaganda rusa y apuntala la economía rusa. China y Rusia también están intensificando sus actividades militares conjuntas en la región Indo-Pacífica», señaló Stoltenberg.
Las declaraciones del secretario general de la Alianza se produjeron justo después de un encuentro en el que los ministros aliados discutieron con los socios de Australia, Nueva Zelanda, Japón y Corea del Sur la amenaza que China representa actualmente para la región del Indo-Pacífico.
Además de las «crecientes actividades» de Rusia y China, Stoltenberg informó de que en la reunión también debatieron las amenazas y desafíos en Oriente Medio y el Norte de África, entre ellos la inestabilidad o el terrorismo, y aseguró que seguirán «colaborando estrechamente» con socios como Mauritania y Túnez para «ayudarles a reforzar sus instituciones de defensa y estabilizar sus países».
Más ambición en gasto militar
Otro de los asuntos que trataron los ministros fue el nuevo objetivo de gasto en defensa que quieren fijar en la próxima cumbre de la OTAN en Vilna en julio.
«Cuando hablo de un compromiso más fuerte se trata de tener un lenguaje mucho más fuerte», recalcó Stoltenberg, que propone como muchos otros aliados que la meta acordada en 2014 de invertir el 2 % del PIB en defensa se convierta «en un suelo del que partir», en vez de un «techo» al que llegar.
Dejó claro que no debería tratarse de «un objetivo ambicioso que alcanzar en un futuro lejano», sino «algo con lo que deberíamos comprometernos firmemente».
«Realmente creo que marcará la diferencia», aseveró.
Promesas vacías de Rusia
En la primera jornada de la reunión ministerial los aliados celebraron una Comisión OTAN-Ucrania en la que recalcaron su apoyo político a ese país además del militar para que se defienda de la agresión rusa.
«No sabemos cuándo terminará esta guerra. Pero cuando termine, debemos asegurarnos de que el presidente Putin no pueda seguir minando la seguridad europea. Por eso, debemos capacitar a Ucrania para disuadir y defenderse de futuras agresiones», afirmó hoy Stoltenberg.
Según dijo, eso incluye «reforzar las fuerzas armadas ucranianas y los acuerdos para la seguridad de Ucrania».
Los aliados ya han empezado a trabajar en el desarrollo de un programa estratégico plurianual de ayuda a Kiev y de cara a que aumente su interoperatividad con la OTAN al equipararla a los estándares de la Alianza, lo que «ayudará a Ucrania en su camino hacia la integración euroatlántica», según Stoltenberg.
Preguntado por el anuncio de Rusia de que desplegará armas nucleares tácticas en su aliado Bielorrusia, el noruego consideró que, teniendo en cuenta que Putin había firmado una declaración con Xi tras su reciente visita a Moscú en la que rechazan el emplazamiento de armas nucleares en el exterior, «sólo demuestra que se trata de promesas vacías».
Insistió en que, por el momento, la Alianza no ha percibido ningún cambio en la postura nuclear de Rusia, si bien aseguró que permanecerán «vigilantes».