SANTO DOMINGO.- Dice el dicho que cuando veas la barba de tu vecino arder, pon las tuyas en remojo. La frase sin dudas se aplica a lo que actualmente vivimos por la pandemia.
Cada día se suman países que comienzan nuevamente a tomar medidas mas restrictivas por la segunda ola del COVID-19. Francia, Italia, España, Alemania, los conocemos bien.
Pero Polonia, la República Checa, Eslovaquia, Eslovenia y Rusia, entre otros estados de Europa del Este, también están instrumentando nuevas normas de control sanitario ante el rebrote. Y que decir de nuestro principal socio comercial, Estados Unidos, donde los contagios van vertiginoso aumento nuevamente.
Todos esos países también tienen economías en crisis, todos celebran navidad y año nuevo, y todos también han vivido el dolor de esta tragedia global.
Ustedes saben que esta servidora les ha suplicado cuando lo ha tenido que hacer, ha hecho llamados puntales durante estos ocho meses, a la población y a las autoridades en cada encrucijada. Ha seguido las cifras, para ver que nos revelan en la actualidad y que proyectan mirando hacia el futuro.
El hecho de que la tasa de positividad del virus se mantenga por debajo del 10 por ciento durante las últimas cuatro semanas, no indica estamos fuera de peligro. El promedio semanal aumentó cuatro puntos porcentuales de una semana a otra, pasando de 8.7 por ciento a 12.6 esta última semana.
La tendencia alcista se destaca a partir del boletín divulgado el jueves 5 de noviembre, cuando esa positividad alcanzó 14.7% luego de estar entre 7.8 y 11.7 durante 11 días.
El patrón se mantuvo este lunes con 14.3% de positividad, casi 15% este domingo, y 13.1% el viernes. Solo un día, el sábado bajo a 11.8% para luego aumentar nuevamente.
He observado a personas muy cercanas a mi entorno llegando sin mascarillas, he visto lo mismo durante recorridos por los barrios. Con incredulidad, estos ojos han visto restaurantes repletos, sin distanciamiento, con mesas pegadas, los comensales todos bebiendo y comiendo, como si el COVID no existiera.
Nos les parece suficiente las 2,267 almas que hemos perdido en casi 8 meses? Ya se nos ha olvidado que nuestro sistema sanitario colapsó durante unas dos semanas, por falta de camas hospitalarias y en UCI? Esto sin entrar en materia económica que nos ha golpeado como país.
Recordemos siempre que éste en un virus asesino, que nos ha arrebatado a amigos y familiares. Sigamos tomando las medidas que hasta la fecha son las únicas que nos protegen, no bajemos la guardia, porque en la confianza está el peligro.
Dice el dicho que cuando veas la barba de tu vecino arder, pon las tuyas a remojar. La frase sin dudas se aplica a lo que actualmente vivimos por la pandemia.
Cada día se suman países que comienzan nuevamente a tomar medidas mas restrictivas por la segunda ola del COVID-19. Francia, Italia, España, Alemania, los conocemos bien.
Pero Polonia, la República Checa, Eslovaquia, Eslovenia y Rusia, entre otros estados de Europa del Este, también están instrumentando nuevas normas de control sanitario ante el rebrote. Y que decir de nuestro principal socio comercial, Estados Unidos, donde los contagios van vertiginoso aumento nuevamente.
Todos esos países también tienen economías en crisis, todos celebran navidad y año nuevo, y todos también han vivido el dolor de esta tragedia global.
Ustedes saben que esta servidora les ha suplicado cuando lo ha tenido que hacer, ha hecho llamados puntales durante estos ocho meses, a la población y a las autoridades en cada encrucijada. Ha seguido las cifras, para ver que nos revelan en la actualidad y que proyectan mirando hacia el futuro.
El hecho de que la tasa de positividad del virus se mantenga por debajo del 10 por ciento durante las últimas cuatro semanas, no indica estamos fuera de peligro. El promedio semanal aumentó cuatro puntos porcentuales de una semana a otra, pasando de 8.7 por ciento a 12.6 esta última semana.
La tendencia alcista se destaca a partir del boletín divulgado el jueves 5 de noviembre, cuando esa positividad alcanzó 14.7% luego de estar entre 7.8 y 11.7 durante 11 días.
El patrón se mantuvo este lunes con 14.3% de positividad, casi 15% este domingo, y 13.1% el viernes. Solo un día, el sábado bajo a 11.8% para luego aumentar nuevamente.
He observado a personas muy cercanas a mi entorno llegando sin mascarillas, he visto lo mismo durante recorridos por los barrios. Con incredulidad, estos ojos han visto restaurantes repletos, sin distanciamiento, con mesas pegadas, los comensales todos bebiendo y comiendo, como si el COVID no existiera.
Nos les parece suficiente las 2,267 almas que hemos perdido en casi 8 meses? Ya se nos ha olvidado que nuestro sistema sanitario colapsó durante unas dos semanas, por falta de camas hospitalarias y en UCI? Esto sin entrar en materia económica que nos ha golpeado como país.
Recordemos siempre que éste en un virus asesino, que nos ha arrebatado a amigos y familiares. Sigamos tomando las medidas que hasta la fecha son las únicas que nos protegen, no bajemos la guardia, porque en la confianza está el peligro.