Un saludo a todos mis queridos lectores.
Dice el Señor: El que no recoge conmigo desparrama. Los que creemos en Cristo tenemos que ser puente de unidad y no pared que paren la unión y el amor entre los hombres.
Hace unos días me contaron una historia que se las quiero contar a Ustedes y dice así: Una vez toco a la puerta un señor, y cuando la señora de la casa abrió, le dijo: Señora tengo la piedra maravillosa, con ella podrá hacer la sopa más deliciosa que usted se halla comido en su vida. La señora maravillada lo mando a pasar hasta la cocina, el señor le pidió una olla, la lleno con agua y le puso la piedra adentro. Cando el agua comenzó a hervir, el señor probo el agua y le dijo esta muy sabrosa. Ella a su vez llamo a todos los vecinos de la cuadra y les dijo que vinieran a ver un hombre que con una piedra hacia una sopa deliciosa.
Todos los vecinos vinieron a la casa de ella, y entonces el dijo: Si tuviera un poco de carne y sal sabría mejor, y un señor que allí estaba dijo: Yo buscare la carne y la sal. Después que el señor trajo la carne y la sal y él se la hecho, dijo: Si tuviera un poco de vegetales sabría mejor todavía, una de las señoras que allí estaba dijo: Yo iré a mi casa y traeré un poco de vegetales, la señora fue y trajo los vegetales y el hombre se los hecho a la sopa, luego dijo el hombre: Seria bueno y de mucho sabor si le echaros un poco de fideos a la misma, una mujer que allí estaba dijo: Yo iré a mi casa a buscar unos fideos. Cuando la mujer regreso, el hombre hecho los fideos a la sopa, y esta quedo deliciosa.
Entonces les dijo el hombre: Pongamos la mesa en la calle y vamos a comer todos. Mientras arreglaban la mesa el hombre desapareció. Todos comieron hasta la saciedad y las personas que no se conocían entre sí, aquel día se conocieron, se hicieron amigos y compartieron juntos aquella hermosa cena.
Pensemos por un momento si somos puente que une a los hombres entre sí, o somos la pared que divide y no deja pasar el amor de Dios.
Término con el Evangelio de San Juan, Capitulo 13, Versículos 34 y 35 donde Jesús nos dice: Un nuevo mandamiento os doy: Que os améis los unos a los otros domo yo os he amado. Así conocerán todos que sois mis discípulos, si os tenéis amor unos a otros.
Hasta la próxima y muchas bendiciones para todos.
Recibe las últimas noticias en tu casilla de email