Entre julio y septiembre de 2025, la tasa de pobreza monetaria general se ubicó en 18.45 %

Santo Domingo.– La pobreza monetaria en la República Dominicana mantuvo su tendencia a la baja durante el tercer trimestre de 2025, aunque persisten desigualdades significativas entre zonas urbanas y rurales, así como entre hombres y mujeres, de acuerdo con el más reciente Boletín Trimestral de Pobreza Monetaria, elaborado por el Ministerio de Hacienda y Economía y la Oficina Nacional de Estadística (ONE).

Entre julio y septiembre de 2025, la tasa de pobreza monetaria general se ubicó en 18.45 %, lo que representa una reducción interanual de 2.38 puntos porcentuales frente al mismo período de 2024. En términos absolutos, alrededor de 242,430 personas salieron de la pobreza, reflejando una mejora sostenida en el bienestar económico de los hogares.

Este desempeño se suma a los avances registrados en 2024, cuando la pobreza monetaria anual cerró en 18.98 %, el nivel más bajo observado en el país desde que se tienen registros comparables, con más de 413 mil personas superando esa condición respecto al año previo .

Desigualdad urbano-rural persiste

El informe revela que la reducción de la pobreza no ha sido homogénea. En la zona urbana, la tasa de pobreza monetaria se situó en 17.51 %, tras una caída de 2.61 puntos porcentuales en comparación con julio-septiembre de 2024.

En contraste, la zona rural registró una tasa de 23.69 %, con una disminución más moderada de 0.98 puntos porcentuales, ampliando la brecha territorial a 6.18 puntos porcentuales en detrimento de las comunidades rurales .

Brecha de género, en descenso

Por sexo, los hombres presentaron una tasa de pobreza monetaria de 16.92 %, mientras que en las mujeres fue de 19.90 %. Aunque ambos grupos mostraron reducciones interanuales, la pobreza continúa afectando en mayor proporción a las mujeres, con una brecha de 2.98 puntos porcentuales. No obstante, el informe destaca que este diferencial es el más bajo registrado desde 2021, lo que sugiere avances graduales en la reducción de desigualdades de género.

Ingreso e inflación: factores clave

El análisis técnico indica que la disminución de la pobreza en el tercer trimestre de 2025 estuvo explicada principalmente por el aumento del ingreso nominal promedio de los hogares, que contribuyó a reducir la pobreza en 3.56 puntos porcentuales, junto con una leve mejora en la distribución del ingreso.

.Sin embargo, estos efectos positivos fueron parcialmente contrarrestados por la inflación, que elevó la pobreza en 1.32 puntos porcentuales, afectando con mayor intensidad el poder adquisitivo de los hogares más vulnerables.

Perspectivas

Si bien los resultados confirman avances estructurales en la reducción de la pobreza monetaria, el informe advierte una desaceleración en el ritmo de disminución en comparación con años anteriores.

En ese contexto, los datos refuerzan la necesidad de políticas públicas focalizadas que atiendan las brechas territoriales, fortalezcan los ingresos reales de los hogares y mitiguen el impacto de la inflación, especialmente en zonas rurales y entre la población femenina.