REDACCIÓN.- El poeta, narrador y dibujante argentino radicado en EE.UU. Hernán Vera escribió «La vida enferma», un extenso poema sobre la pandemia y su exposición de «todos los lados débiles, ridículos y miserables que tiene la condición humana» después de sobrevivir a
la covid-19.
«Estamos viviendo un clima donde la peste, el virus, es de todos los días. La vida enferma la vivimos cotidianamente estemos o no enfermos», dijo a Efe Vera, profesor de español en la Universidad Internacional de Florida (FIU, en inglés) que dice haber perdido la noción del tiempo durante la pandemia.
«La vida enferma» fue publicado esta semana por Sudaquia, un sello editorial independiente de Nueva York enfocado en autores hispanos de Estados Unidos y latinoamericanos.
«Este libro salió por la fuerza de estar enfermo, por la fuerza de la desesperación», confiesa.
En los versos de «La vida enferma» un narrador habla de lo que está sucediendo a su alrededor, mientras su voz se alterna con «una historia de amor y deseo de una chica ‘trans’, que quiere volver a La Habana y ser allí reina del carnaval con sus siliconas chinas».
«Es lo que puede llegar a hacer el amor y el deseo en estos tiempos de la peste. Yo digo la peste porque hay un libro que me marcó mucho, ‘Diario del año de la peste’ (de Daniel Defoe), que fue escrito en 1722», señala.
«En el año de la peste/cuando un hombre ve a otro hombre caminando por la calle/ridículamente/se aparta, es una rata histérica/que corta la respiración:/cuenta hasta diez/y luego, ya en soledad/regresa a su pequeña vida», escribe Vera en «La vida enferma».
Las vacunas, un factor desigual
Vera nació en Buenos Aires y vive desde hace 21 años en Estados Unidos, donde promueve la literatura en español en su taller de narrativa «La tribu Vera», y con el pódcast «Conversación Nocturna», de entrevistas a escritores hispanos.
Desde el comienzo de la pandemia en Miami en abril de 2020, dice haber vivido todo un año encerrado.
«El ostracismo no ha sido bueno porque ha sido impuesto, y eso atenta contra la libertad. Cuando uno no tiene libertad se ve encerrado, cautivo», comenta.
Su nuevo volumen sobre lo que él llama «una experiencia colectiva» llega avalado por las escritoras Anjanette Delgado, puertorriqueña, y Keila Vall de la Ville, venezolana, ambas residiendo en Estados Unidos.
«La vida enferma es un diccionario para un mundo de pronto lleno de cosas innombrables. Es un corto de cine filmado desde el interior de un año perseguido, asustado», escribe Delgado en la edición de Sudaquia.
En su repaso por la soledad, el desabastecimiento y ese mirar hacia otro lado, Vera escribe estos versos:
«Detesto esa solidaridad de las redes sociales,/que no son nada, sólo un esfuerzo de un click,/una caridad de mentira».
«Yo creo que la humanidad todavía no se ha dado cuenta de que algo que aparentaba ser pasajero se ha convertido en una cotidianidad. De alguna manera me acerca a cierto clima de guerra, en el sentido de que países del primer mundo no han solucionado este tema y no va a ser en este año», comenta Vera.
Según el poeta, «la peste ha expuesto grandes problemas y situaciones de cómo administrar el dinero, las vacunas en Latinoamérica se las han robado, en África no hay vacunas y en Europa es un caos», sentenció.